Me acuerdo cuando salió, y cómo repercutió en la forma de leer y de informarnos sobre la música, porque para aquellos que no nos gusta tanto el mainstream y buscamos cosas nuevas o diferentes, el NO hacía eso: darte otra info y otra mirada, acompañar culturas alternativas y darles espacio a bandas que necesitaban difusión. Y no solamente a las conocidas del under, sino a otras que estaban surgiendo con cosas interesantes. Asimismo, la cartelera era referencia para hacer algo.

NormA tuvo la suerte de tener varias notas, dos tapas. Fue un gran honor, a pesar del título de una de ellas, ¡estábamos totalmente en desacuerdo! De todos modos fueron muy buenas conversaciones, sobre todo cuando el que te entrevista está informado, sabe lo que pensás y lo que tenés para decir.

El NO es una marca muy importante para la cultura argentina, tiene que seguir y reinventarse para atraer nueva gente y nuevo público. Yo no soy el caso, ya que por un tema de edad quedé fuera del rango de alcance, ja. Pero deben seguir dándoles espacio a las bandas que necesitan difusión. Tiene que ser un polo, una referencia, un faro para la contracultura.