Quiero felicitar al NO por estos 25 años, lo cual es un logro en un país donde las reglas del juego son tan cambiantes. Me hicieron muchas notas, pero recuerdo muy bien una hermosa tapa que compartí con el Tano Romano. Ambos estábamos con formatos tributo, y ahí me di cuenta de que el suple era muy pluralista y que le daba cabida a todas las voces, ya que el heavy lograba un despliegue impensado. Encima es el último suplemento de cultura joven que subsiste, lo cual le da un relieve y una trascendencia aún mayor. Me siento orgulloso de haber sido entrevistado varias veces y será un gusto seguir participando en otros tantos años. Que, espero, sean más que otros 25.