La fiscala penal de Violencia de Género y Delitos contra la Integridad Sexual de Orán, María Soledad Filtrín Cuezzo, requirió la captura internacional del ex obispo de esa diócesis, Gustavo Oscar Zanchetta, quien está imputado por abuso sexual agravado en perjuicio de dos víctimas.
La fiscala pidió que se dicte la rebeldía del religioso. Entre sus fundamentos para pedir la captura internacional, Filtrín Cuezzo sostuvo que el imputado no respondió a reiterados llamados telefónicos ni correos electrónicos, a pesar de que esos intentos de contacto por parte de la Fiscalía fueron hechos al número telefónico y la dirección electrónica aportados voluntariamente por el sacerdote en agosto pasado, para ser notificado de cualquier acto procesal y luego de haber constituido domicilio en el estado de el Vaticano.
El Ministerio Público Fiscal de Salta recordó que Filtrín Cuezzo "se opuso y apeló el levantamiento de las medidas restrictivas que permitieron a Zanchetta salir del país", porque anticipaba que podía llegar a pasar algo como lo que finalmente aconteció y por la "evidente falta de voluntad" de Zanchetta a "someterse a los llamamientos judiciales de comparecer a los actos procesales".
La salida del país de Zanchetta fue autorizada por el juez de Garantías de 2° Nominación, Claudio Alejandro Parisi. De esa manera el cura pudo volver a Ciudad del Vaticano, donde fijó residencia y desde donde ahora evitar responder a los requerimientos de la justicia salteña.
En el pedido, Filtrín Cuezzo también repasó las oportunidades en las que debieron realizarse trámites ante la Nunciatura, la misión diplomática de máximo rango de la Santa Sede ante el Estado argentino, para que Zanchetta compareciera.
Tribunal constituido
Por otra parte, el pasado 12 de noviembre la fiscala fue notificada de la conformación del tribunal colegiado que llevará adelante el juicio contra el ex obispo imputado por abuso sexual simple continuado agravado por ser cometido por un ministro de culto reconocido en perjuicio de dos víctimas. Estará integrado por los jueces de la Sala II del Tribunal de Juicio de Orán, con la presidencia de la jueza María Laura Toledo Zamora y las vocalías de los jueces Raúl Fernando López y Héctor Fabián Fayos.
Filtrín Cuezzo requirió el juicio contra el religioso en julio pasado. En el pedido de elevación, incluyó los elementos probatorios colectados durante la investigación y los resultados de las pericias psiquiátricas y psicológicas realizadas por profesionales del Centro de Investigaciones Fiscales (CIF).
Entre otros aspectos, el informe psiquiátrico indica que el acusado “presenta personalidad con rasgos psicopáticos (indicadores de manipulación, emociones superficiales, escasa capacidad empática); no presenta psicosis, ni otro trastorno mental que altere la relación con la realidad. Se vincula a través de interrelaciones dispares, ejerciendo poder sobre el otro, y que puede comprender la conducta desplegada y discernir actos socialmente reprochables".