Miles de personas llegan desde distintas provincias bolivianas hasta Senkata para repudiar la masacre de ayer en la bloqueada planta de abastecimiento de combustible . Al grito de “el Alto no está solo carajo” los manifestantes se proponen llegar a La Paz para repudiar la represión de las fuerzas de seguridad, que provocó al menos nueve muertos y 50 heridos.
Efectivos de la Policía y de las Fuerzas Armadas dispararon a mansalva ayer a la altura de la cabeza de los manifestantes para intentar levantar el bloqueo en Senkata, a 40 kilómetros del centro de La Paz. A 24 horas de lo sucedido la zona está completamente militarizada.
La Defensoría del Pueblo confirmó que trepó a nueve la cantidad de fallecidos durante el operativo de desalojo y adelantó que todavía hay personas desaparecidas. “Estamos haciendo la convocatoria para que los familaires vengan, hagamos la denuncia en caso de desaparecidos y procedamos con la búsqueda”, detalló la defensora Nadia Cruz.
A pesar de que las imágenes de los disparos eran muy claras, el ministro de Defensa, Fernando López intentó negar todo. “Me encantaría aclarar que del Ejército no salió ni un solo proyectil. Las Fuerzas Armadas se mantienen con la premisa del diálogo permanente”, se atajó, y subrayó, en consonancia con el gobierno de facto que encabeza Jeanine Añez: "Nos sigue guiando la Biblia y la paz para todos nuestros actos, aquellos actores ligados a la violencia ya tienen un carácter de terrorismo de Estado".