La verdad es que soy fan del NO. Cuando puedo lo compro, sobre todo cuando nos vamos de viaje, y si no lo veo online. Soy fan, sobre todas las cosas, porque siempre puso el foco en una movida que suele ser bastante invisible en los medios nacionales, ahí donde a mi parecer suceden las cosas nuevas, frescas, originales, que buscan romper un poco los cánones.

También me parece muy importante la faceta política que tiene el suplemento. El diario en sí tiene una historia muy definida y el NO sigue esa línea y la mezcla con todo lo que es la cultura joven; eso le da una energía especial y otro vuelo a todo, porque la política obviamente está en todos lados.

Es un orgullo que sigan existiendo cuando todo empieza a ponerse más difícil. Los tiempos cambian y en el mundo los medios se están adaptando a nuevos modos de consumos culturales; sin embargo, en Argentina los medios grandes parecen volverse más conservadores.

Lo bueno del suplemento NO es que siempre estuvo atento a todo lo que está sucediendo sin perder de vista el pasado y todo lo que hace a la cultura rock-pop en general. Hace poco salió Juli Ibarrolaza en la tapa y me emocionó mucho porque es mi ídolo máximo. ¡Aguante el suplemento NO, feliz cumpleaños y por otros 25 años más!