Fue una puesta en escena similar a la que se vería en el Congreso unas horas más tarde. El jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, abrió las sesiones en la Legislatura porteña con un mensaje hacia los gremios docentes que van al paro: “Aprovecho para reafirmar nuestra vocación inalterable de diálogo con los representantes sindicales de los docentes, para que las clases empiecen a tiempo y los chicos no pierdan días por paro”. Desde las bancas, los kirchneristas sostenían carteles que decían: “Con 18 por ciento, ustedes no quieren que empiecen las clases”. En el Gobierno porteño, consideran que el conflicto con los docentes está nacionalizado. Larreta hizo un repaso, además, del proceso de urbanización de las villas y de la Policía de la Ciudad. Los opositores lo cuestionaron por no abordar la falta de vacantes en las escuelas. 

Tempranero como siempre, Larreta hizo que sus ministros estuvieran a las 7.30 para una reunión de gabinete que hicieron en un salón de la Legislatura. “Literalmente, terminó la reunión y entramos al recinto”, contó uno de los asistentes a este diario. La Legislatura estaba desde aún más temprano rodeada de un operativo policial para evitar que llegaran gremios docentes y estatales. Sin sorpresas, Larreta dio un discurso que sus asesores definieron como “99 por ciento gestión”. El otro 1 por ciento fue dedicado al conflicto docente, luego del fracaso de las negociaciones. 

Uno de los temas obligados fue el traspaso de la Federal y el reciente lanzamiento de la Policía de la Ciudad. Agradeció al gobierno nacional y advirtió que la sintonía política fue importante para que estuvieran los fondos. También planteó que avanzará con la urbanización e integración de las villas y dijo que su sueño es que “se conviertan en barrios”. Mencionó la inauguración de algunas manzanas de la Villa 31. “Los chicos de esas manzanas hoy ya no se embarran cuando van a la escuela un día de lluvia”, aseguró, pese a las fotos que mostraron las cuadras inundadas hace una semana. Repitió que todo era “gracias al gobierno nacional”.

Además, resaltó que tomó “el compromiso de erradicar la cultura machista que se lleva nuestras hermanas, a nuestras hijas. Una mujer por día es asesinada por la violencia machista”. Indicó que creará más “refugios y lugares secretos” para las víctimas. Destacó la construcción de la Villa Olímpica de Lugano, el Ecoparque, el boleto estudiantil y el Paseo del Bajo, una autopista para descomprimir la Illia. Como un hito de este año, destacó el desalojo con represión de los manteros de Once. “Si tuviera que resumir en pocas palabras lo que está pasando en la Ciudad, esas palabras son movimiento, transformación y cambio”, aseguró Larreta, quien citó a Jorge Luis Borges para definir al sur de Buenos Aires, en el que –aseguró– está puesta la mira de la gestión.

“El método PRO es generar expectativas que nunca se cumplen. En la calle le dicen vender humo”, afirmó el jefe del bloque kirchnerista, Carlos Tomada.

“El principal escollo de Larreta es gobernar con Macri de presidente, cuyas políticas están deteriorando todos los indicadores sociales: hay 200 mil personas que viven en villas; faltan vacantes en las escuelas pública y el ingreso familiar promedio perdió el 6 por ciento de su poder de compra”, sostuvo Tomada. “Es una vergüenza que hayan aumentado los peajes más del 50 por ciento, un 38 por ciento el ABL y que a los docentes les ofrezcan sólo un 18”, indicó el legislador de Nuevo Encuentro, José Cruz Campagnoli.

Desde ECO, Natalia Fidel sostuvo que fue un discurso “correcto”, aunque “no profundizó sobre la falta de vacantes en las escuelas porteñas, la seguridad en los hospitales públicos o la problemática de los trapitos”. Desde el Frente Renovador, Javier Gentilini indicó que “se habló del servicio del subte como si fuera uno de los mejores del mundo y la realidad es que en hora pico uno tiene que forcejear para poder meterse en un vagón y luego viajar como ganado”. “No se puede entender que con 40 grados, los usuarios de la línea D continúen viajando sin aire acondicionado”, advirtió Adrián Camps, del PSA. Jorge Selser, de Proyecto Sur, advirtió que “no dijo qué piensa hacer con la salud que presenta estándares que son una vergüenza, con hospitales desmantelados”. Marcelo Ramal, del FIT, indicó que “Larreta presentó una visión idílica de la Ciudad”.