“El paro no es a Mauricio Macri o a María Eugenia Vidal, los chicos son los que pierden los días de clase, discutamos todo pero con los chicos en el aula”, dijo ayer la gobernadora María Eugenia Vidal sobre la huelga nacional docente, al tiempo que admitió lo justo del reclamo salarial de los maestros pero acusó a los gremios de tener “intencionalidad política”. En su extenso discurso de apertura de las sesiones en la Legislatura provincial, interrumpida por constantes aplausos y vistiendo una blusa color crema, la mandataria planteó como sus dos principales peleas la de obtener los recursos que le corresponden a la provincia por coparticipación y la lucha contra la inseguridad. “Es la principal demanda que me plantean cuando visito a los vecinos”, explicó.
Vidal reconoció que “los docentes merecen un salario mejor y esperan que yo se los dé. Lo sé porque los conozco y hablo con ustedes, sé que su reclamo es justo, las diferencias que tenemos con los gremios no tienen que ver con lo que queremos sino con lo que podemos. El compromiso que puedo cumplir es que su salario no pierda frente a la inflación, voy a hacer mi mejor esfuerzo, pero sé que merecen más”.
Vidal se dirigió a los sindicatos docentes al expresar que “el camino que eligieron no es el mejor, no es fácil sostener el diálogo cuando las intenciones de algunos no son claras, o cuando nos dicen que aún acordando la paritaria las clases no empiezan. Declararon un paro diez días antes del inicio de las clases, es una decisión arbitraria porque el ministro de la Nación no los convoca a paritarias nacionales”. Y agregó: “El paro no mejora nada ni la educación de los chicos ni los salarios, nos va minando la confianza, y genera que la educación pública se esté privatizando de hecho porque crece la matrícula en el sector privado”.
La gobernadora de la provincia de Buenos Aires destacó que “aún cuando ya convocaron al paro seguiremos convocando al diálogo, con la realidad de la provincia adentro y la intencionalidad política afuera. Les pido que discutamos salarios y condiciones de trabajo, no sean funcionales sólo a los que responden sólo a sus propios intereses políticos”. También reclamó negociar “con los chicos dentro del aula”.
La gobernadora Vidal aseguró que por primera vez en décadas “se trabaja en conjunto con el gobierno nacional”, y convocó a todos los sectores a conformar una mesa para implementar políticas de seguridad a largo plazo. “Este año, aunque sea electoral, tenemos que seguir dando las peleas que hacen falta. No estamos acá para el aplauso fácil, porque la provincia no soporta más el camino de los atajos, las avivadas ni la improvisación”, dijo Vidal al abrir el 145° período de sesiones ordinarias de la Legislatura provincial.
Vidal admitió que muchos bonaerenses “tuvieron un año difícil y todavía no vieron los resultados que esperamos”, aunque les pidió que “persistan y me acompañen con su voto” en las elecciones legislativas de este año.
También agradeció al presidente Mauricio Macri “por haber confiado desde el primer momento y por el apoyo incondicional en cada uno de los desafíos” que afronta su gestión. “En un año no se puede resolver todo lo que no se hizo en 25, pero estamos avanzando en el camino correcto. No aflojen porque este cambio es necesario y ya sabemos lo que pasa cuando maquillamos la realidad”, graficó.
Tras señalar que la lucha contra la inseguridad “es la principal demanda que me plantean cuando visito a los vecinos”, Vidal interpeló directamente a cada habitante de la provincia: “Por eso -dijo- peleo contra las mafias porque sé que peleo por cada mamá y papá que tiene miedo cada vez que su hijo sale de noche, lo hago por vos, por tu hermano, por tu papá, porque estoy acá por vos, no lo hago por mí ni por ninguna candidatura.”
Según afirmó, hasta el 2015 “las fuerzas de seguridad se autogobernaban. Ahora nos estamos modernizando para que la policía esté donde tiene que estar, porque más seguridad no es más sino mejor policía”. Puntualizó que “todavía hay sectores que son parte de un sistema de corrupción y tenemos que separarlos” y si aseguró que “nuestra decisión política es transformar un sistema que era corrupto, cueste lo que cueste y lleve el tiempo que lleve”. Vidal reconoció que “la provincia aún duele”. No aclaró a quién.