En algún mes del año 2013 me encontraba en Montevideo, en la casa del escritor y humorista uruguayo Ignacio Alcuri. Nos encontrábamos trabajando en el guión de nuestra novela gráfica Parto de nalgas cuando de pronto sentimos que había demasiado silencio en el aire y empezamos a pensar con qué música podíamos interrumpir ese silencio tan intimidante y quizás hasta lograr un clima más inspirador para pensar textos irrelevantes y chistes chotos para lo que sería nuestro primer libro conjunto de historieta. Propuse escuchar música uruguaya y después de tirar varias bandas y solistas, Nacho me pregunta "¿A Mandrake lo conoces?". Yo conocía la música de Jaime Roos, de Leo Masliah, de Fernando Cabrera y de otros artistas uruguayos, pero a Mandrake no lo conocía.

Alberto "Mandrake" Wolf es un músico y compositor uruguayo que desde mediados de los ochenta (su primer disco fue compartido mitad cada uno con El Cuarteto De Nos, que también debutaba discográficamente) viene amasando una obra con varios discos en la espalda donde aparece el rock, la canción y el candombe. Luego de insultarme por no conocerlo me dijo: "Seguro te va a gustar, para mí es un crack". Alcuri metió mano en sus listas de reproducción y puso "Días atrás" . Y tenía razón, me iba a gustar. La canción de Mandrake (que abre su disco del 2005 Hay cosas que no importan junto a su histórica banda Los terapeutas) me cautivó antes de llegar al estribillo. Para la mitad ya estaba adentro y para cuando terminó ya era fan. Ni bien arrancó el tema percibí que se trataba de uno de esos artistas únicos, la manera de cantar, el pulso rockero, esa mezcla de nervio punk y sensibilidad casi naif. Cuánta verdad había en esa canción (de menos de dos minutos de duración) cuanta simpleza (de las simplezas complejas), cuánta emoción. Y no digo verdad por lo que dice la letra, porque hable de cosas importantes o se comprometa con causas humanitarias, sino verdad en la intención, en el concepto. Una verdad como la que tenía la música de Eduardo Mateo, del Príncipe Pena, de Alfredo Zitarrosa , (por mencionar algunos nombres míticos del cancionero uruguayo de todos los tiempos), pero mezclada con los Beatles, The Who y Led Zeppelin.

Por supuesto, empecé a escuchar toda la obra de Mandrake y me enteré de que es el autor de "Amor profundo" (luego convertida en hitazo por Jaime Roos en su disco de versiones Contraseña). Es interesante ver en YouTube ("gracias YouTube por todo lo que nos das!") los respectivos videos de las versiones del tema de Roos y la original de Mandrake (en la que participa...Jaime Roos!) y comparar diferencias, parecidos, sensibilidades y presupuestos de filmacion. Y finalmente pude verlo en vivo (hace un par de años en el Café Vinilo de Buenos Aires, en un show compartido con el también uruguayo Martín Buscaglia) y me di cuenta que hay algo mejor que las canciones de Mandrake: las presentaciones de las canciones. Iría a ver uno de sus recitales aunque no tocara ningún tema y solo contara anécdotas, las mejores introducciones de canciones que escuche jamás en un espectáculo en vivo.

Pero ahora que lo pienso (y recuerdo su imagen), probablemente haya algo mejor aún que sus canciones y sus largas introducciones: su cara. Cuando vi su cara en internet se me armó el rompecabezas completo, era la cara ideal para esa música y esa voz, no podía ser otra. Si Mandrake hubiera tenida la cara de Colin Farrell o la de Robert Pattinson habría sido una decepción y no lo hubiera escuchado nunca más. Pero ese rostro, ese pelo, ese bigotito de dandy montevideano, me terminaron de enamorar. Y me enamoré mas aún cuando en una entrevista de 2015 en El Observador TV (otra vez, "gracias YouTube...") Mandrake, hablando de su bigote y su pelo, dijo "una pregunta que hago siempre cuando veo que una chica tiene el pelo largo, lindo, es "¿Qué shampoo usás?"

Hoy, cada vez que charlo con alguien y surge la cultura uruguaya o la música en general, no pierdo la oportunidad de preguntarle: "¿Conocés a Mandrake?"

 

Gustavo Sala nació en Mar Del Plata en 1973. Es humorista gráfico, guionista y conductor de radio. Publica desde hace 14 años la tira Bife angosto en el suplemento NO de Página/12, que lleva 5 tomos recopilatorios. Editó más de 15 libros, entre ellos Tumor gráfico, Viva la caca y Desgracias totales. Conduce el podcast Sonido bragueta junto al uruguayo Ignacio Alcuri. youtube.com/sonidobragueta.