La sucursal de Correo Argentino en la calle Deán Funes de Salta Capital permaneció cerrada ayer para la atención al público. El Sindicato de Empleados de Correos y Telecomunicaciones (Sitracyt) lleva tres días de protesta y decidió parar en reclamo del pase a planta permanente de 37 trabajadores del interior provincial que se desempeñan como carteros, carteras y ayudantes.
El secretario general de Sitracyt, Julio Reifenberg, dijo que también realizaron medidas de fuerza en General Güemes. Chicoana, Cerrillos, Campo Quijano, Orán, Tartagal y en El Carril.
Mauricio Cruz tiene 41 años, es cartero en Campo Quijano y se trasladó a la Capital para reclamar el pase a planta permanente. “Hace 12 años que trabajo en Correo Argentino con la empresa tercerizada Bayton. Estoy laburando seis horas por día, de martes a viernes. El sueldo es mínimo, de 8 mil pesos al mes. Tengo esposa y tres hijos de 11, 8 y 5 años. La verdad que no alcanza, y todos los compañeros estamos en la misma situación”, contó a Salta/12.
Sobre la regularización laboral, Cruz expresó: “Bayton nos dice que tenemos que ver con Correo Argentino, porque ellos no saben nada de eso”.
Reifenberg dijo a Salta/12 que vienen con este reclamo de pase a planta permanente desde el año pasado. “Antes, en total eran 87 los trabajadores en condiciones precarias. Logramos que ingresaran 50 pero quedaron 37 distribuidos en el interior: San Antonio de los Cobres, Pocitos, Aguaray, General Mosconi, Embarcación, Pichanal, Colonia Santa Rosa, El Carril, Campo Quijano, Chicoana, General Güemes, Cerrillos, Joaquín Víctor González y Apolinario Saravia. Están en malas condiciones laborales, con contratos muy específicos, realizan diferentes tareas y ganan un sueldo miserable que no pasa de 10 mil pesos”, manifestó el dirigente sindical.
Reifenberg aclaró que sus compañeros y compañeras llevan desde tres años a 15 años en condiciones de precariedad: "trabajan todo el mes y les pagan por 10 u 11 días”. “Son padres de familia, llevan aguantando mucho tiempo”, expresó.
"El público tiene que entender"
El dirigente explicó que a nivel nacional hay una medida por paritarias, pero en Salta se están manifestando por el pase a planta permanente.
“La venimos peleando pero como las cosas se deciden siempre en Buenos Aires, acá no nos escuchan. La única forma es seguir luchando”, sostuvo Reifenberg. También contó que “desde la empresa amenazan” con posibles denuncias, les han pedido que levanten la medida y abran las puertas al público. “El público tiene que entender que los trabajadores son seres humanos y que necesitan vivir dignamente”, aseveró el dirigente.
“En el Correo hay cuatro gremios, nosotros somos los únicos en condiciones de protesta. Los otros están obstaculizando, denunciando que no pueden entrar compañeros de otros gremios a trabajar”, contó el secretario del Sitracyt y aclaró que “las puertas están abiertas” para empleados y empleadas, pero bloquearon la atención al público.
La trabajadora de General Güemes, Viviana Lopez, protesta en la Capital en representación de dos carteros y una cartera de su localidad. “Vengo para acompañar a los compañeros con el fin de que los puedan pasar a planta permanente. Por los compañeros eventuales que hace muchos años que trabajan cumpliendo tareas de personal contratado, sobrecargados de horas. Para que después de tanto tiempo tengan los mismos derechos como trabajadores de Correo Argentino. No estoy en esa situación pero por compañerismo vine”, expresó la mujer, afiliada a Sitracyt.
Además, los carteros y una cartera de Güemes “tienen un seguro mínimo” de trabajo, López dijo que no saben si ante un eventual accidente les cubrirá la ART. También contó que hay muchos envíos para repartir y sus compañeros y la compañera se esfuerzan para alcanzar a cubrir los barrios y las localidades de El Bordo, Betania, Cobos, Cabeza de Buey. “Están en la calle, su integridad física corre peligro. Cargan paquetes muy grandes, en la bicicleta o motocicleta, eso puede provocarles un accidente, y no hay otro medio de movilidad para poder cumplir con el reparto”, sostuvo López, quien además detalló que el medio de transporte lo pone cada trabajador y trabajadora.
López dijo que donde trabaja, hay dos empleados para atención al público y tres para el reparto, pero falta personal porque están con sobrecarga de tareas. “En vez de cumplir un horario mínimo se trabaja 8 o 10 horas. Consideramos que es injusto y que se debería incorporar a más gente para que el servicio a los usuarios se agilice”.
Reifenberg afirmó que van a seguir con la protesta “hasta tener novedades”. Y deseó que "esto se solucione lo más pronto posible, así no molestamos a la gente y los compañeros tienen la satisfacción de pasar a planta permanente”.