La estatua del delantero sueco Zlatan Ibrahimovic y una de sus viviendas en Suecia sufrieron actos de vandalismo en las últimas horas después de que el futbolista anunciara que se convertía en copropietario del Hammarby, rival del Malmoe, su club de origen.

La estatua de bronce de casi tres metros, que fue inaugurada el mes pasado y que está ubicada entre los dos estadios de fútbol de Malmoe, en el sur del país, fue pintada en la noche del miércoles con spray blanco y atacada con bengalas, con las que intentaron prenderla fuego, de acuerdo a lo que publicó la agencia EFE. Además, los vándalos le pusieron una bolsa azul en la cabeza y le colgaron una tabla de inodoro en uno de sus brazos, mientras que en el piso escribieron la leyenda "Muere, gitano".

Así quedó la estatua después del ataque de los hinchas. (AFP)

El propio jugador, nacido y crecido en Malmoe pero de origen bosniocroata, viajó hace un mes desde Estados Unidos, donde jugó las dos últimas temporadas en Los Angeles Galaxy, a su ciudad natal para inaugurar la estatua, que fue un regalo de la Federación Sueca por ser el máximo goleador de la historia del equipo nacional.

Muchos aficionados del Malmoe ya habían mostrado el miércoles en diferentes medios suecos y en redes sociales su descontento con la decisión del jugador de adquirir cerca del 25% de las acciones del Hammarby, un club de Estocolmo y rival del equipo en el que "Ibra" se dio a conocer dos décadas atrás, antes de ser transferido al Ajax, donde comenzó a brillar a nivel internacional.

Pero la intimidación a Ibrahimovic no se dio sólo con la estatua, sino que también en una de las casas que el futbolista tiene en Estocolmo, donde los violentos pintaron un portón de entrada de madera con la palabra "Judas", ya que consideran que el delantero traicionó al Malmoe con su decisión.

El goleador de 38 años ya anunció el mes pasado que abandonará Los Angeles Galaxy y la Liga de los Estados Unidos, pero no está claro si jugará en otro equipo o anunciará su retiro.