La tercera audiencia por la denuncia de contaminación en la finca San Javier, donde se emplaza el vertedero de residuos sólidos de Salta y de seis comunas de la zona metropolitana, terminó sin dar mayores certezas sobre cuál es la situación y qué resolverá la justicia ante los reclamos de los vecinos de la zona sur.

El juez Marcelo Domínguez, que tiene hace más de dos años la causa, escuchó a cada una de las partes y a los técnicos, y terminó la audiencia con una declaración poco auspiciosa: la apertura de la Trinchera IV no se resolverá este año y será la próxima gestión municipal la encargada de habilitarla así como de definir la compra y la instalación de la geomembrana.

"Asumo una realidad: el cambio de gestión municipal, y más allá de la continuidad jurídica del Estado, puede generar que haya una dilación en el tiempo. Preguntar cuándo va estar la geomembrana me parece aventurado. Cualquier manifestación al respecto pecaría de poco seria porque no van a ser ustedes los que van a tener que llevar adelante esa instalación", dijo el magistrado luego de escuchar a los representantes del gobierno municipal.

Dónde poner la basura

Desde hace cuatro años, tras el cierre del Módulo III (Trinchera III), las 850 toneladas diarias de residuos que llegan al relleno sanitario se siguen acumulando en el Módulo I, reabierto por orden del municipio y que está llegando a un punto crítico en cuanto a altura. 

"Los riesgos de seguir utilizando el Módulo I es que sigamos elevándonos y depositando los residuos en pisos superiores y con el tiempo no vamos a poder hacerlo, por la cantidad de residuos que recibimos necesitamos más espacio para afrontar la situación", dijo Julio Cabral, ingeniero a cargo del Relleno Sanitario de Agrotécnica Fueguina. 

"Lo estamos dotando de infraestructura para capturar lixiviados y gases", agregó y dijo que en los últimos cuatro años se sumó más de un millón de toneladas a esa Trinchera.

En cuanto a la apertura de la nueva Trinchera, el especialista dijo que los trabajos previos de colocación de la geomembrana y acondicionamiento de la infraestructura llevarán otros cuatro o cinco meses, condicionados por la temporada de lluvias que puede dificultar el trabajo en el predio, y agregó que los estudios de impacto ambiental ya se realizaron de acuerdo a los dispuesto en el pliego de bases y condiciones. 

"Se presentaron todos los estudios de suelos, hidrogeológico, topográfico, de línea de ribera, y en base a esto se realizó el Estudio de Impacto Ambiental y se determinó que es factible implementar el módulo San Javier 4 en el actual sitio", dijo.

Mientras tanto, en los barrios más vulnerables

El reclamo de los vecinos afectados por lo que declaran es una contaminación permanente del aire, el agua y la tierra de la zona, permanece desde hace dos años en la justicia con el pedido de un amparo para que la Municipalidad contenga la contaminación. 

Sin embargo, desde la empresa prestadora aseguran que las actividades que se realizan en el sitio de disposición final no representan riesgo alguno para la población y que las plagas están controladas, así como la emanación de gases y polvo.

Jorgelina Franco, la concejal con mandato cumplido y demandante en la causa, asegura que la empresa "no cumplió en lo más mínimo lo estipulado en el contrato para contener la contaminación. Uno de estos elementos es el cercado perimetral forestal, que hasta ahora no lo tiene. Los montículos de basura no deben superar el cercado perimetral y eso para nada se cumple. Además los perros que entran y salen y son vectores de contaminación", dice Franco.

"Me voy con un sabor amargo porque no se cumplió en nada lo que se pautó en la anterior audiencia", dijo. 

"Después de la visita al vertedero se obligó a la empresa presentar los estudios indispensables para el trabajo de recolección de residuos, ese plazo se venció el 25 de septiembre y el juez no tomó ninguna medida", reclamó. 

"Normando Zúñiga trata a los vecinos de la zona como vándalos y dice que no hay cercado perimetral por actos de vandalismo de los vecinos. Los árboles no crecen porque la tierra está contaminada y no asumen esa responsabilidad", agregó Franco.

Cristina Foffani, concejal del Partido Obrero, coincidió con la falta de confianza en la modificación de la situación en el predio y el impacto en el ambiente donde viven cientos de familias. 

"No tenemos ninguna confianza en que vaya a progresar a partir solamente de la vía judicial. Creemos que con la fuerte intervención de los vecinos y la población se va a terminar con este verdadero basural a cielo abierto en el que se ha convertido el vertedero San Javier y por el que se le paga a la empresa Agrotécnica Fueguina casi 3 millones de pesos diarios", dijo.