Con el objetivo de revertir la emergencia habitacional, Alberto Fernández reiteró en distintas oportunidades que trabaja en esta problemática junto a la arquitecta María Eugenia Bielsa, y que será uno de los puntos centrales de la próxima gestión.
“Vamos a crear un ministerio de la Vivienda porque hoy en esta ciudad (Buenos Aires) hay 7 mil personas que deambulan sin encontrar un techo y es la más opulenta de la Argentina. Necesitamos darles a los argentinos una vivienda y vamos a construirlas”, aseguró el presidente electo durante el debate presidencial.
La ex vicegobernadora de Santa Fe ya se puso en contacto con mandatarios provinciales e intendentes para analizar la situación actual de los planes de vivienda. Incluso, participó junto a Fernández y al gobernador Sergio Uñac de una recorrida de campaña por el Paseo de las Palmeras, un complejo de viviendas populares en la provincia de San Juan. Bielsa está planificando una estrategia integral y federal con el objetivo de reactivar la construcción, motorizar la economía y paliar el déficit habitacional que afecta en mayor medida a los sectores de menores ingresos, pero también a los sectores medios y medios bajos.
Los que podrían ser los lineamientos que tiene la próxima gestión en carpeta se dieron a conocer en el documento que elaboraron los equipos técnicos del PJ. La Comisión de Trabajo, economía popular, social y solidaria plantea la necesidad de un programa de viviendas sociales y urbanización en villas y asentamientos que se podría ejecutar con la “erogación del 2,92% del gasto público” y generaría “un total 150 mil empleos”.
La Comisión Hábitat y Vivienda, por su parte, sostiene que se deben impulsar las obras que quedaron paralizadas durante la gestión de Mauricio Macri al que acusan de haber ejecutado “la desintegración, segregación y desarticulación de las políticas públicas de vivienda”. Señala que Cambiemos propuso “una división entre las áreas destinadas a atender negocios inmobiliarios, por un lado, y por el otro las áreas de asistencia a la pobreza”. Para motorizar las obras pendientes, sugiere “crear líneas de crédito dirigidas a sectores con capacidad de ahorro” y “créditos para ampliación y terminación de viviendas”. En el informe, que estuvo a cargo del arquitecto Santiago Pérez, se señala que “el 60% del déficit habitacional no requiere la construcción total de viviendas nuevas, sino la puesta en valor de las existentes”.
Alberto Fernández se comprometió, además, a revisar la situación de las más de 100 mil familias que accedieron a los créditos UVA. Una de las opciones que se baraja es aplicar “un congelamiento inicial para atender la urgencia”. A su vez, se contemplan subsidios parciales a los alquileres para los adultos mayores, la pesificación de las tarifas de los servicios públicos y la promoción de la gestión de los residuos.