"Lo que vi ayer fue un acto defensista maravilloso, impecable. Uno de los mejores alegatos defensistas que vi en mi vida, que dejo mudos a los jueces. No era una mujer furibunda, era una mujer que se estaba defendiendo ". La opinión del presidente electo, Alberto Fernández, emitida este martes en la Metro, destrozó las insólitas operaciones que pretendían instalar que Fernández estaba enojado porque Cristina Kirchner lo había nombrado en su declaración, diciéndole a los magistrados que lo escuchen porque fue Jefe de Gabinete y puede explicar cómo se asignan los presupuestos de las obras.
La realidad es que Alberto fue propuesto hace más de un año por la defensa de CFK, que lleva adelante Carlos Alberto Beraldi, y el tribunal lo incluyó en la nómina de testigos en mayo, junto con Aníbal Fernández, Jorge Capitanich, Sergio Massa y Juan Manuel Abal Medina, todos los jefes de Gabinete de los gobiernos kirchneristas.
El próximo lunes se escuchará al primero de la nómina de 181 testigos totales: será el ex diputado de la Coalición Cívica, Juan Carlos Morán. Como se sabe, en los juicios siempre se arranca por los testigos de la acusación.
En diálogo con María O'Donnell y Andy Kutznetzov, el mandatario que asumirá el martes fue más que elogioso con la declaración de su vicepresidenta y respaldó totalmente la forma en la que Cristina encaró el expediente, al que calificó como "vergonzoso". "Es no saber cómo funciona el Estado, es no saber como se resuelven y ejecutan las obras públicas. Técnicamente es un disparate todo lo que han hecho con Cristina", dijo el presidente electo.
La ex presidenta explicó que las rutas de Santa Cruz, como todas las obras públicas, se votaron en la ley de presupuesto nacional de cada año , es decir que fue una decisión del Congreso. Dado que la Constitución --CFK la leyó ante los jueces-- establece que quien ejecuta el presupuesto es el jefe de Gabinete, desafió a los magistrados diciéndoles que tienen que escuchar a quienes ocuparon esa función: "tendrán que oír al presidente de la Nación entrante, que fue jefe de Gabinete hasta 2008", dijo CFK. Y Alberto la respaldó señalando: "Cristina dijo una obviedad: el que administra es el jefe de Gabinete. Mostró la incoherencia de la acusación, no me involucró a mí".
Los dichos de CFK dispararon una serie increíble de operaciones y se publicó que Alberto estaba enojadísimo con ella porque "lo había nombrado", o "acusado" o "involucrado" y otra cantidad de versiones descabelladas, siempre con el eje que usaron durante todo el año: la existencia de un enfrentamiento entre CFK y AF. El mandatario entrante hizo añicos esas versiones.
La realidad es que el presidente que asume el martes próximo figura en la lista de testigos desde mayo, cuando el TOF 2 lo incluyó. Por entonces, ni se soñaba con que AF iba a ser presidente y CFK vice. Pero todos los jefes de Gabinete están en la nómina porque justamente son los que administran los presupuestos de las obras. Y no sólo eso, son los que formulan los decretos de necesidad y urgencia con los que se reasignan fondos, desde las áreas en las se está sub-ejecutando el presupuesto a las áreas en que se necesitan más fondos. Lo acaba de hacer, por ejemplo, Mauricio Macri.
Por supuesto que los jefes de Gabinete no son los únicos testigos. Están convocados una serie de empresarios que hicieron obras en la Patagonia y en otras zonas, entre ellos Angelo Calcaterra, el primo de Macri, y Carlos Wagner. Es muy probable que alguno de los imputados pida también el testimonio de Cristóbal López ya que, sorpresivamente, el perito oficial tomó en cuenta su oferta por tres tramos de la ruta 3 para demostrar la existencia de sobreprecios. En esos tres tramos, la empresa CPC, de Cristóbal López y Fabián De Sousa, hizo una oferta bajísima por razones de política empresaria, perdió 100 millones de pesos y le devolvió la obra al estado. Hoy, los trabajos están abandonados y con absoluto deterioro.
Pero, como en todos los juicios, la serie de testigos arranca por los que representan a la acusación. El primero, que está citado para el lunes próximo, es el ex diputado de la Coalición Cívica, Juan Carlos Morán. Y hay otros nombres, que después de haber visto el expediente de Dolores en el que se investiga el armado de causas, no deberían llamar la atención: el periodista Daniel Santoro, la diputada Paula Oliveto y el multi--arrepentido Leonardo Fariña. El ex marido de Karina Jelinek declaró en este expediente y todo indica que su testimonio fue guionado por la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), según declararon sus propios abogados, incluyendo a la letrada que lo entrenó porque Fariña no tenía idea de cómo son las licitaciones de la obra pública .
Hasta el momento hubo varios de los imputados que no declararon, entre ellos el hombre clave del caso, Lázaro Báez. El constructor lo hará más adelante y explicará cómo ganó las 51 licitaciones viales, sobre la base de que fue el que armó el único grupo de empresas que en Santa Cruz tenía el personal y las maquinarias necesarias para emprender esas obras.
Se calcula que las declaraciones de los 181 testigos abarcará casi todo el año 2020, de manera que el fallo se conocerá a fin del año entrante o a principios de 2021.