Sergio Hernández, quien comenzará su tercera etapa como entrenador del seleccionado argentino de básquetbol, aseguró que tiene “la misma ilusión que cuando le ofrecieron la Selección en 2005”, que “no hay desafío más fuerte” que dirigir a Argentina y que el “objetivo es clasificar a los Juegos Olímpicos de Tokio”.
La Oveja Hernández pasará a ser entrenador full time (antes lo era part-time) en un nuevo ciclo hasta 2020. “En la actualidad no encuentro un desafío más importante que conducir un seleccionado como el argentino. No extraño nada de ser entrenador de clubes y al mismo tiempo de un seleccionado”, manifestó ayer en una rueda de prensa.
El DT, de 53 años, que ya estuvo en la Selección en 2005-2010 y 2015-2016, afrontará con Argentina este año la Copa América, torneo del que será sede junto con Colombia y México. Además en noviembre tendrá las ventanas FIBA, un nuevo sistema para clasificar al Mundial de China 2019.
“Lo que siento en el equipo nacional es increíble. Por eso cuando me convocaron nuevamente no tuve ninguna duda. Me parece que acá el formato nuevo de FIBA exige que sea full time”, sostuvo Hernández, quien como DT del seleccionado logró la medalla de bronce en los JJ.OO. de Beijing 2008 y las de plata en los Fiba Américas 2005, 2007 (clasificatorio) y 2015 (clasificatorio). Además, finalizó cuarto en el Mundial de Japón 2006 y quinto en el de Turquía 2010.
Con respecto al equipo, que tiene como principal meta clasificarse a los Juegos de Tokio 2020, el Oveja subrayó: “El recambio de la Generación Dorada viene desde el 2008 cuando me tocó dirigir en Beijing, ya ahí quedaban solamente seis jugadores de los campeones olímpicos. Es real que ahora es más profundo porque se fueron Andrés Nocioni y Emanuel Ginóbil, sin embargo el recambio generacional se viene fomentando desde los clubes y todos los entrenadores seremos importantes para eso”, afirmó.