Tras casi una semana de lucha, con paros y movilizaciones, la Asamblea de Residentes y Concurrentes de la Ciudad logró que el bloque del oficialismo porteño de la Legislatura se comprometiera a derogar la ley que aprobó en soledad el jueves pasado, mientras afuera la policía reprimía la protesta contra la norma que precariza aún más las condiciones laborales de estos trabajadores que sostienen la salud pública. Además, consiguieron arrancarle al gobierno de Horacio Rodríguez Larreta un acuerdo para conformar una mesa de trabajo con los profesionales de la salud para elaborar una nueva ley. No obstante, este jueves, el paro sin guardia continuará mientras la Asamblea se moviliza a las 8 hasta la Legislatura, donde se tratará sobre tablas el proyecto.
"Es un avance muy importante, pero no hay nada definido. Hasta que este compromiso no esté cumplido no vamos a levantar la medida y vamos a seguir en nuestro nuevo consultorio que es la calle", dijo a Página/12 Sebastián Goin, médico residente del Hospital Argerich e integrante de la Asamblea.
Durante una reunión que mantuvieron este miércoles con los asambleístas, el gobierno porteño se comprometió a derogar la ley que aprobaron el 28 de noviembre pasado. Con la firma del legislador Daniel Presti, presidente del bloque Vamos Juntos, presentaron un proyecto de Resolución para dejar sin efecto la ley 2828-D-2019, que ingresó por Mesa de Entrada a la Legislatura a la tarde.
En el encuentro con las autoridades, los asambleístas lograron también que los funcionarios firmaran un acuerdo para desarrollar una nueva norma. El acta firmada sostiene que las partes acuerdan "constituir una mesa de trabajo que contemple la participación de los profesionales de la salud residentes a los fines de elaborar una nueva ley".
"Nos reunimos con el secretario de Gobierno y otros funcionarios, y se comprometieron a tratar el proyecto sobre tablas. Creemos que si sale, el logro es inédito. Tienen que derogar una ley que votaron hace una semana en medio de la represión, y armar una mesa de trabajo para construir un nuevo proyecto de ley que nos contemple, elaborado con todas las partes, que es lo que veníamos exigiendo", explicó Goin.
"La ley debe ser modificada, tiene más de 30 años y tuvo más de 40 modificaciones, pero tiene que ser progresiva en derechos laborales, que nos tenga en cuenta y que nos considere trabajadores", agregó el vocero de los residentes.
El lunes pasado, la ministra de Salud porteña, Ana María Bou Pérez, había propuesto, ante el rechazo masivo de la ley aprobada, y el paro por tiempo indeterminado de los residentes y concurrentes, trabajar en la reglamentación de la ley y el veto parcial de algunos artículos. Solución que el pleno de los asambleístas rechazaron.
Al respecto, Goin explicó que "ni la reglamentación ni el emparchado puede salvar una ley que desde la base está sesgada, llena de omisiones y ausencias y que avala un régimen esclavo sin pago a los concurrentes", y agregó que "esto es un logro del colectivo de la Asamblea de Residentes y Concurrentes que democrática y horizontalmente consiguió que dieran marcha atrás".
En el mismo sentido, la legisladora de Unidad Ciudadana Andrea Conde dijo a este diario que "el macrismo en la Ciudad nos tiene acostumbrados a precarizar y despreciar todo lo público. Pero con la ley de residentes había ido demasiado lejos. No sólo queno había consultado con nadie sino que quisieron aprobarla por la fuerza. No duró ni una semana, y el apoyo de la ciudadanía a los médicos fue fundamental".