El falso abogado Marcelo D'Alessio continuaba declarando, al caer la noche de este lunes, en el mayor de los secretos. Todo transcurría en una pequeña oficina de la fiscalía federal de Dolores y, según trascendió, D'Alessio continuará declarando este martes y posiblemente también el miércoles, porque más allá de sus dichos el fiscal Juan Pablo Curi le hará una gran cantidad de preguntas. Asistido por su abogado, Claudio Fogar, D'Alessio intenta convencer a Curi para que lo acepte como arrepentido, algo que no es sencillo porque el fiscal ya rechazó a dos imputados anteriores que llegaron a Dolores con la idea de acogerse a los beneficios de esa ley. Entre esos beneficios podría estar una excarcelación o, al menos, una prisión domiciliaria.
D'Alessio empezó a declarar cerca de las diez de la mañana y hubo varios cuartos intermedios a lo largo de las horas en las que estuvo en la fiscalía. Todo indica que el falso abogado se quedará a dormir en una comisaría de Dolores y recién retomará la declaración cerca de las 16 de este martes: es que su abogado tiene un audiencia judicial y por lo tanto no se podrá arrancar antes.
Qué dijo
Respecto del contenido, tanto el defensor de D'Alessio como el fiscal mantuvieron absoluta reserva. La declaración está siendo grabada y todo indica que el acusado reconocerá algún delito de extorsión y de espionaje ilegal --las pruebas son demoledoras-- y tratará de convencer al fiscal explicándole cómo era el organigrama de las operaciones de espionaje ilegal, con cabeza en la Agencia Federal de Inteligencia (AFI). También es muy posible que reconozca que algunas de las investigaciones --también ilegales-- que puso en marcha fueron por pedido de legisladoras de la Coalición Cívica y no está claro si va a involucrar al fiscal Carlos Stornelli y al periodista Daniel Santoro. Es un hecho que D'Alessio estuvo estudiando la indagatoria que Stornelli prestó la semana pasada.
Una vez terminada la declaración, Curi deberá resolver si acepta o no a D'Alessio como arrepentido. Y en caso de que lo acepte, la última palabra la tendrá el juez Alejo Ramos Padilla.
En las espaldas de Curi pesan las sospechas de que desde el inicio de la causa ha jugado a favor de la estructura judicial--política--mediática con sede en Comodoro Py, que siempre quiso derribar la causa de Dolores. Curi dictaminó varias veces que el expediente que instruye Ramos Padilla debe pasar al edificio de Retiro donde, ya se sabe, Stornelli juega de local y lo mismo sucede con otros de los imputados.
Es seguro que Curi le exigirá a D'Alessio pruebas de todo lo que diga, algo que no es para nada sencillo. Por un lado, el falso abogado ha demostrado su capacidad para mentir y falsear hechos e identidades. Por el otro lado, buena pare de sus operaciones se hicieron en el marco del aparato de inteligencia que, supuestamente, se cuida de dejar rastros.