Alejandro Espejo es estudiante de la carrera de abogacía de la Universidad Católica de Salta (Ucasal). Se encadenó tras ver que la decisión de las autoridades de la Universidad no daría marcha atrás. La semana pasada las autoridades de la casa de estudio anunciaron un aumento del 45% en las cuotas mensuales con una matrícula de $20 mil para 2020. Los estudiantes piden que se reduzcan las cuotas y se merme la matrícula.
“No me alcanza para poder estudiar”, dijo Espejo. Cursa el tercer año de la carrera, trabaja y tiene una hija. “La verdad que la situación es muy desesperante”, manifestó. Se encadenó en el predio de la Universidad desde las 15.30 de ayer. “Trabajo, pago un alquiler, mantengo a mi hija y no me alcanza”, aseguró.
Espejo dijo que su planteo es que “los aumentos no sean muy excesivos”. Incluso reconoció que es necesario que se “revean las cuotas” y “si quieren, que hagan aumentos paulatinos pero que no sean en un solo monto”.
Según el anuncio, la matrícula iría a $20 mil y las cuotas mensuales pasarían de $7950 a $11500 a partir del año próximo.
Actualmente Espejo adeuda tres cuotas de la carrera. Esto le impidió presentarse a rendir en las mesas finales de estos meses. Para el financiamiento de las cuotas anteriores, recurrió al pago con sus tarjetas de créditos. “Me endeudé con las tarjetas de crédito y no me dejan rendir con la deuda de las otras tres”, relató.
El estudiante contó que durante las horas de la tarde de ayer no se acercó ninguna autoridad de la Universidad. Anunció que continuará con la medida de fuerza "hasta dar con la reducción”.
Estudiantes de la Facultad de Salud de la Universidad Nacional de Salta (UNSa) se dirigieron hasta el predio de la Ucasal para controlar el estado de salud del manifestante.
Que el gobernador los escuche
Los estudiantes de Abogacía se manifestaron ayer en las puertas de la Legislatura provincial. Debido a la asunción del gobernador Gustavo Sáenz, decidieron apelar a que los medios y el mismo mandatario los escucharan. Anteayer habían marchado por las intermediaciones de la Ucasal.
La referenta estudiantil de la Ucasal, Ángeles Cimino dijo que se manifestaron porque anteayer recibieron una respuesta negativa de parte de las autoridades de la Universidad para reducir el precio de la cuota. "Entendemos que acá están los nuevos políticos que van a asumir, les queremos preguntar a la gente que hizo campaña a costa de hablar de educación ¿dónde están? ¿Por qué están dejando que nos avasallen, que se lucre con la educación?", interrogó.
La matrícula actual en la Católica "está entre 11 y 12 mil pesos. Para el año estará en 20 mil. Todo lo que sea aparte de la cuota para sentarse a cursar, se paga", especificó. "Hasta ahora ningún político se solidarizó ni habló con nosotros, por eso es que estamos acá", contó Cimino. Dijo que de parte de las autoridades reciben "un trato nefasto". "Nos dijeron que no pueden ser subjetivos pero estamos hablando de familias que se van a quedar con inversiones nulas, con chicos que no van a poder continuar sus estudios, con gente que está en el último año que no sabe si va finalizar. Hay chicos de 18 años a los que les hicieron planes de pago para endeudarlos", señaló.
Además la estudiante dijo que la Ucasal tiene un monopolio de las carreras más estratégicas en Salta, "no hay esa oferta educativa en la Universidad Pública, no tenemos abogacía, psicología, trabajo social, educación física, veterinaria, criminalística. La Universidad Nacional de Salta tendría que tener carreras estratégicas".
Cimino reiteró el pedido de reducir las cuotas y solicitar que “los aranceles coincidan con los servicios que nosotros recibimos”. Explicó que en la reunión con el vicerrector administrativo, Darío Arias, les comunicaron que el aumento iba a seguir su curso y que el ofrecimiento de la Universidad era dar planes de pagos. La joven cuestionó la medida y se preguntó, “¿cómo hacés para que chicos de 18 años accedan a planes de pago y se endeuden toda la vida?”.
Dijo que lo que se decidió resulta “impagable” para los estudiantes. El justificativo de los aumentos es la actual inflación. No obstante, Cimino dijo que “la inflación no está de acuerdo al salario del estudiante”.
Asimismo, aseguró que parte del estudiantado “no puede trabajar ochos horas porque no va a poder cursar y no va a poder a hacer nada”. Además, sostuvo que, “está mal lucrar con la educación”.
“No podemos romantizar que un estudiante tenga que romperse la espalda trabajando para estudiar”, aseguró; dijo que “el estudiante no tiene que descuidar el estudio para pagar”. Y que los aumentos llevarían a “endeudarse y generar una situación de frustración física y psíquica”.
La propuesta de la Ucasal
Desde la Universidad les presentaron una propuesta que no responde a la reducción de las cuotas sino a modos de financiamientos y descuentos temporales referidos a la matrícula.
Las autoridades universitarias dispusieron congelar el monto de la matrícula a valor del 2019 hasta el 31 de diciembre. Propusieron un 15% de descuento en la matrícula 2020 en tanto sea abonada entre el 1 y 24 de enero del próximo año.
Además, plantearon un “pago parcial” de la matrícula. En este ítem se dejaría disponer el monto de cada pago al estudiante, pero tendría que cancelar hasta el 30 de abril. Si se tiene el 50% de abonado, se podrá cursar y rendir los exámenes de las carreras.
Por último, ofrecieron que la matrícula se pueda pagar en 6 cuotas sin interés con tarjetas de crédito del banco Macro, y 10 cuotas con la tarjeta del banco Ciudad.
Desde la Universidad
se comprometieron a “cooperar con la economía familiar de quienes acrediten que
ese incremento constituye una barrera insalvable”. En este sentido, se indicó que la Ucasal “asumirá el costo económico de la diferencia, en relación a dichos
alumnos”, se expresó en un documento presentado a los estudiantes.