A pesar de todos sus intentos por evitarlo, el represor de la Esma Mario "Churrasco" Sandoval fue detenido en Francia y llegará a Argentina en los próximos días, luego de que el gobierno de Emmanuel Macron habilitara finalmente su extradición para ser indagado y juzgado por el secuestro y la desaparición del estudiante Hernán Abriata. La familia del joven estudiante celebró la medida: "Para nosotros, que en medio del miedo y el dolor no paramos un minuto de pedir justicia, es reconfortante", apuntó Mónica Dittmar, compañera de Abriata. La hermana del joven, por su parte, auguró: "Ya queda  poquito para que pueda llegar a Argentina y sea juzgado con todas las garantías constitucionales que son las que no tuvieron todos los desaparecidos argentinos". 

Sandoval fue detenido ayer por agentes de la Gendarmería francesa por orden de la Oficina Central para la lucha contra los crímenes de lesa humanidad, genocidio y crímenes de guerra (OCLCH según su nombre francés). El ex policía de la Federal se encontraba en su domicilio en Nogent-sur-Marne, un suburbio al este de París, según anunció el Ministerio del Interior galo.

La detención se concretó un día después de que el Consejo de Estado de ese país rechazara el último recurso que le quedaba al represor para evitar que la Justicia local determinara su extradición hacia Argentina, en donde se lo investiga por delitos de lesa humanidad durante la última dictadura. El Ministerio del Interior francés aseguró que la decisión de esa máxima jurisdicción administrativa del país "es definitiva". Cuando llegue al país, será trasladado a la Unidad Penitenciaria 29. 

En Argentina será indagado y juzgado por las violaciones a los derechos humanos de Hernán Abriata, un estudiante de arquitectura y militante de la Juventud Universitaria Peronista a quien Sandoval y el resto de una patota de la Policía Federal secuestró en octubre de 1976 y trasladó a la Esma. Nunca más se supo nada de Abriata. En diálogo con Página/12, su compañera Mónica Dittmar recordó los reclamos que tanto ella como el resto de la familia del joven sostuvieron "desde el primer momento, desde que Hernán fue secuestrado, incluso entonces con miedo y dolor". 

"Para nosotros, que hasta hoy nos inundaba la sensación de que todo era tan injusto, que la falta de Hernán nos ha destrozado la vida, saber que de alguna manera él va a tener esa justicia que tanto pedimos siempre nos reconforta. Al fin Sandoval va a ser juzgado en Argentina, al fin lo veremos. Valió la pena pelear por él y todos nos nuestros compañeros", añadió.   

La lucha por la extradición de Sandoval

En su calidad de policía de la Federal, Sandoval integró la patota de la Esma durante la última dictadura. Con la recuperación de la democracia, huyó hacia Francia, en donde se radicó. Logró la ciudadanía casi 15 años después, en 1997. Allí se diplomó en temas como seguridad e inteligencia económica. Trabajó como asesor de los paramilitares colombianos, como colaborador de varias empresas y dio clases en las Universidades de La Sorbonne Nouvelle y de la Universidad de Marne-la-Vallé.

Su nombre aparece vinculado de manera directa en cerca de 500 casos de secuestros, torturas y desapariciones, según el expediente que investiga los crímenes de lesa humanidad que tuvieron lugar en aquel centro clandestino de la Armada. No obstante, el juez de primera instancia Sergio Torres se basó en un solo caso para exigir a Francia la extradición del represor: el secuestro y la desaparición de Abriata, a quien sacó de la casa familiar el 30 de octubre de 1976 bajo la excusa de llevar a cabo "un procedimiento de rutina".

El objetivo tardó ocho siete años en concretarse debido a que "Churrasco" resistió de todas las maneras que pudo. "Tuvo y tiene muchos recursos. Una red que lo protege en Francia --fue funcionario del gobierno de Nicolás Sarkozy--, así que no nos sorprendería que siga resistiéndose a su extradición", informó Dittmar. La familia de Abriata reclamó sin cesar la entrega de Sandoval por parte del gobierno frnancés en compañía de la abogada represetante del Estado argentino, Sophie Thonon. 

Cada vez que la extradición del genocida parecía estar a punto de concretarse, él la frenaba con un nuevo recurso. Tras haber sido aprobada por el Tribunal de apelación de París, y luego por el Tribunal de Casación francés, equivalente a la Corte Suprema local, el año pasado el Gobierno galo firmó la habilitación para que el ex policía fuera trasladado a Argentina a rendir cuentas. Sin embargo, el represor acudió al Consejo de Estado siempre con los mismos argumentos: negando las acusaciones y, por las dudas, apelando a que en todo caso los hechos prescribieron. 

Al igual que en instancias anteriores, el Consejo le dio vuelta la cara: el plazo de prescripción de un delito empieza a correr sólo a partir del momento en que aparece el cadáver de la víctima o en que se admite el delito. Como no ocurrieron ni una cosa ni la otra --Abriata permanece desaparecido--, los cargos que se le endilgan a Sandoval no culminaron. 

La defensa del represor acudió a una instancia más, ya fuera de Francia, para evitar ser juzgado en Argentina: remitió el asunto al Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) estimando que "Francia está violando sus compromisos europeos", anunció el miércoles su abogado, Jérôme Rousseau. La estrategia no tendrá resultados concretos, según Sophie Thonon, la abogada representante del Estado argentino ya que el recurso "no frena la aplicación del decreto de extradición". Se espera que llegue al país este fin de semana. 

"La noticia la estábamos esperando con mucha ansiedad. Y hoy se confirmó después de tantos años. Fue un camino muy arduo, con muchos altibajos, pero ya queda poquito para que pueda llegar a Argentina y sea juzgado con todas las garantías constitucionales que son las que no tuvieron todos los desaparecidos argentinos", declaró la hermana de Hernán, Laura Abriata, a la agencia de noticias gala.