Daniel Santoro deberá presentarse a una nueva declaración indagatoria. Es el segundo llamado de la Justicia como imputado por maniobras de espionaje ilegal y extorsión. En esta oportunidad, el periodista deberá dar explicaciones ante el juez federal Luís Rodríguez por el delito de partícipe de extorsión en grado de tentativa. Es en el marco de la causa que investiga si el empresario Gabriel Traficante fue víctima de aprietes y seguimientos para involucrarlo en el expediente conocido como “la mafia de los Contenedores”. Santoro tendrá que ir a Comodoro Py un día antes de la noche buena, el próximo 23 de diciembre a las 11 de la mañana.
En la causa iniciada por la denuncia del empresario aduanero, Rodríguez ya procesó al falso abogado Marcelo Sebastián D´Alessio, al fiscal suspendido Juan Ignacio Bidone y a los espías rolando Barreiro y Claudio Álvarez. Todos los procesamientos ya fueron ratificados por la Cámara Federal.
Para el juez, “se tiene por acreditado que D’Alessio se contactó con Gabriel Traficante y, bajo la presión de que podría parar el desarrollo de una “investigación irregular” en su contra (...) le exigió el pago de distintas sumas de dinero”. La extorsión y reiteradas amenazas tuvieron lugar “gracias a la información privilegiada brindada a D’Alessio” por parte de Bidone, Alvarez y Barreiro, quienes le suministraron registros telefónicos y movimientos migratorios de Traficante.
El rol de Santoro
Para concretar el apriete, la hipótesis es que Santoro publicó notas periodísticas en las que involucraban a Traficante en hechos delictivos.
Según señaló Rodríguez en una de sus resoluciones, la extorsión a Traficante incluyó la amenaza de publicar notas por parte del periodista Daniel Santoro en el diario Clarín “que podrían arruinar su reputación”.
Según había relatado un testigo citado por el juez en el auto de procesamiento de D'Alessio, el falso abogado “le decía (a Traficante) que al día siguiente Santoro publicaría una nota en Clarín vinculando a Gabriel Traficante en la causa de la ‘mafia de los contenedores’ y que él todavía estaba a tiempo de decirle a Santoro que bajara su nombre del artículo periodístico en cuestión”. En ese momento el aduanero no le creyó y no pensó que D’Alessio podía llegar a tanto. Sin embargo, “al día siguiente efectivamente salió una nota en Clarín vinculando a Traficante con la mafia de los contenedores”, con la firma de Santoro.