En febrero se profundizó el deterioro del sector automotor por la menor demanda del mercado interno y la caída de las exportaciones con destino a Brasil. Adelanto de vacaciones, suspensiones y eliminación de turnos fueron las consecuencias de una menor actividad de las terminales en el segundo mes del año. De acuerdo con un informe de la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa), se fabricaron 24.036 unidades, un 10,2 por ciento menos que en el enero previo y un 29,7 por ciento por debajo de igual mes del año pasado. Por su parte, las exportaciones de febrero alcanzaron los 12.931 vehículos, una cifra 8,8 por ciento inferior a la de igual mes de 2016, mientras que las ventas de las terminales a sus redes de concesionarios mejoraron 25,8 por ciento en el cotejo interanual. 

En enero hubo un repunte en la producción, el cual no respondió a una mejora en la actividad sino a una baja base de comparación, ya que en el primer mes de 2016 se habían fabricado apenas 17.785 unidades. Eso permitió que este año el cotejo interanual para ese mes diera una mejora de 50,5 por ciento al alcanzarse una producción de 26.762 vehículos, apenas por encima de la mitad del promedio de todo el año pasado (en torno a 40 mil unidades). En febrero el nivel de producción se retrajo frente a enero previo (10,2 por ciento) pero en la comparación interanual se registró un desplome contra una producción de 34.174 vehículos de ese mes en 2016. 

Los resultados de enero y febrero, contrapuestos, explican que el bimestre se mantuviese parejo en la comparación. “Más allá de la estacionalidad y las paradas de planta producto del receso estival, entre enero y febrero, el sector produjo 50.798 unidades, un 2,2 por ciento menos respecto de las 51.959 que se produjeron en el mismo período del año anterior”, informó Adefa. Esto derivó en recortes y suspensiones en el sector. Esta semana se conoció que General Motors suspenderá a unos 350 empleados de su planta de General Alvear por nueve meses, quienes cobrarán en ese lapso el 80 por ciento del salario.

La mayor caída en febrero se registró en el segmento de automóviles, ante una menor demanda por parte de particulares. En ese rubro la producción local fue de 9291 unidades, un 51,5 por ciento menos que en igual de mes del año pasado (19.159 vehículos). En el bimestre la producción nacional de automóviles se ubica un 21,9 por ciento por debajo de 2016. En utilitarios el retroceso fue del 1,8 por ciento, al pasar de 15.015 a 14.745 unidades. 

La caída en la producción se explica por la menor demanda interna y por el menor volumen de unidades exportadas, principalmente a Brasil. Las automotrices exportaron en febrero 12.931 vehículos entre autos y livianos, lo que refleja un avance de 32,6 por ciento respecto del volumen exportado en enero pasado, y una baja de 8,8 por ciento si se lo compara con las 14.178 unidades que se exportaron en febrero del año anterior. En el acumulado del primer bimestre, las ventas alcanzaron un total de 22.685 unidades, un 25,6 por ciento por sobre el volumen que se registró entre enero y febrero de 2016.

“Estos volúmenes, junto con los de producción, reflejan el impacto de la caída de la demanda por parte de Brasil que, sólo en febrero, registró una contracción del 65 por ciento. Frente a este comportamiento, el informe da cuenta del esfuerzo de las terminales automotrices en desarrollar nuevos mercados para compensar esa caída. En este sentido, se destaca el incremento de los envíos a destinos como Guatemala, Panamá, Costa Rica, Honduras, Perú y Nueva Zelanda, por mencionar algunos”, señala Adefa. El mercado brasileño redujo su participación en la torta exportable al 59,3 por ciento, luego de haber llegado a representar más del 80 por ciento de las ventas externas. “Este comportamiento marca la necesidad de seguir trabajando para alcanzar acuerdos para acceder a esos mismos mercados sin la penalización del pago de aranceles y a otros que son de interés para las terminales y a los cuales hoy no se exporta”, detalla el informe de la asociación de fábricas.  

Por su parte, las ventas mayoristas sumaron 65.274 unidades, es decir, un 23,5  por ciento más respecto de las 52.841 comercializadas en enero previo y un 25,8 por ciento por sobre el desempeño del mismo mes del año pasado (51.900 unidades). En el acumulado del bimestre, las ventas mayoristas acumularon 118.115 unidades y con ello se registró un incremento de 16,4 por ciento en su comparación con las ventas registradas en el mismo período del año anterior. La cifra se condice con los resultados informados por los concesionarios: en febrero se patentaron 57.205 unidades, con un aumento de 19 por ciento respecto de igual mes del año pasado, que había sido particularmente reducido en ventas (por debajo de 50.000 vehículos), según la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina.