El impuesto de 30 por ciento que anunció el gobierno el fin de semana alcanzará a todos los pagos por compras en moneda extranjera realizados con tarjeta de crédito. Por lo tanto, no sólo se aplicará a los consumos en el exterior sino también a servicios online como Netflix, Spotify y Airbnb. El llamado dólar tarjeta se ubicará en torno a los 82 pesos, si se le aplica el 30 por ciento al dólar oficial, hoy en 63 pesos.
“Los sectores que tienen la capacidad de hacer un viaje al exterior van a tener un tributo, que también se aplicará a la compra de pasajes que estén en dólares o en servicios como Netflix”, afirmó el fin de semana Santiago Cafiero, jefe de Gabinete.
El anuncio generó una catarata de consultas de los consumidores. Desde el Banco Central indicaron a PáginaI12 que no será este organismo el encargado de realizar la regulación, sino que la competencia recaerá en el Poder Ejecutivo. Los detalles se conocerán este martes cuando el gobierno presente el proyecto de ley de Solidaridad y Reactivación Económica.
“El proyecto debería aclarar que el impuesto es para compras en comercios domiciliados fuera de Argentina, sin importar la moneda de venta”, indicó a PáginaI12 Ariel Setton, economista especializado en medios de pago. “Si la compañía es extranjera pero hace onshoring, no debería aplicar”, agregó. Es decir, el tributo no aplicaría a compañías multinacionales que presten el servicio desde Argentina.
Por ende, el impuesto aplica a servicios como Netflix, Spotify o Airbnb, más allá de que puedan tener oficinas en Argentina, dado que el servicio se brinda desde el exterior. Esto va más allá de la moneda en que se cobre. Pagarán el tributo los usuarios de Netflix, por más que la tarifa esté en pesos. Queda definir si el 30 por ciento es sobre el precio final, dado que las tarifas incluyen 21 por ciento de IVA. En caso de que así sea, el plan básico de Netflix pasaría de 179 a 233 pesos; el plan standard de 269 a 350 pesos y, el plan premium, de 369 a 480 pesos. Lo mismo ocurre con Spotify. El plan individual pasaría de 99 a 129 pesos y el familiar de 149 a 194 pesos.
También el tributo recaerá en servicios de alojamiento como Airbnb. Por más que tenga oficinas en Argentina y la contratación sea para un alojamiento en algún destino del país, dado que la facturación se hace con tarjeta a través de las empresas en el exterior, y no mediante los dueños de las propiedades de alojamiento. Por las sucesivas devaluaciones, la compañía dejó de aceptar pagos en pesos y hasta exhibe sus tarifas directamente en moneda extranjera, aun cuando se trata de un departamento en Mar del Plata.
Apenas el usuario ingresa al sitio web, se muestra un cartel que indica que los términos de pago fueron actualizados y exige que sean aceptadas las nuevas políticas para utilizar sus servicios. A través del servicio de atención al cliente, desde AirBnb explican que este cambio debió ser implementado "luego de varios inconvenientes, ya que algunos bancos dolarizaban la tarifa y otros no, por lo que se decidió quitar el peso argentino de la plataforma".
Con estas modificaciones estarán alcanzados otros servicios provistos desde el exterior, como servicios de almacenamiento estilo Dropbox o iCloud de Apple, aplicaciones en Google Play o iOS, videojuegos, plataformas de streaming, antivirus, plataformas de compras como Amazon o Ebay, entre otros. “Más allá de que puede perjudicar al consumidor, lo más importante no es Netflix, sino la pérdida de competitividad de los profesionales que compran insumos para trabajar, como suscripciones a software”, opinó Romina Gaya, economista especializada en comercio y servicios basados en el conocimiento. “Armar un listado de servicios excluidos es muy difícil porque hay herramientas de trabajo que pueden ser generalizadas como el uso de Google Drive, pero otras son muy específicas”, agregó. Las discriminaciones que podrían realizarse son entre bienes y servicios o rubros de comercio, pero no por locación de compra.
Cabe aclarar que el tributo no aplicará en servicios de mensajería como Glovo. Desde la compañía dijeron a PáginaI12 que proveen los servicios localmente dado que en su desembarco Glovo España compró una empresa local.
El objetivo de la medida es proteger las reservas del Banco Central. “Las compras con tarjeta en el extranjero se pagan con dólares del Central, que hay que cuidarlos mucho porque tenemos un virtual default. Con el reperfilamiento se pateó deuda de este año para el que viene y hay una herida muy fuerte con respecto a la deuda externa. Necesitamos recaudar esa diferencia entre el gasto con tarjeta que después se paga en pesos aquí y los dólares que terminan saliendo del Banco Central”, indicó el Jefe de Gabinete.
Una de las externalidades de esta imposición será el fomento al turismo local, generador de empleo en diversas ciudades del país. “No hay que prohibirle a nadie que viaje o compre lo que quiera. Pero es importante que el que tenga capacidad de comprar en el extranjero haga un aporte a los sectores más postergados”, indicó Cafiero.