Unos 125 casos en los que mujeres madres o abuelas migrantes enfrentaban procesos de expulsión fueron atendidos durante 2018 en la Defensoría General de la Nación (DGN). De ese total, 107 corresponden a casos de madres con hijxs argentinxs, 11 a madres con hijxs no argentinxs y 7 a casos de abuelas a cargo de sus nietos/nietas. En 32 casos, además, se trató de familias monoparentales y algunas de esas madres habían sido víctimas de violencia doméstica. “Sus órdenes de expulsión también fueron confirmadas sin tener en consideración sus situaciones particulares”, se desprende del informe de la Comisión del Migrante de la DGN, en el marco del Día Internacional del Migrante, este miércoles, y que coincidió con el 40° aniversario de la adopción de la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer, de la cual la Argentina es Estado parte.
Los perjuicios que sufren las personas que no son nacionales y residen en el Estado argentino fueron expuestos en un informe alternativo que la DGN presentó en agosto ante el Comité de Protección de los Derechos de todos los Trabajadores Migratorios y de sus Familiares de las Naciones Unidas (CMW). Allí se advirtió sobre la falta de perspectiva de género al momento de decidir respecto de las mujeres denominadas “mulas”, que son expulsadas por infracciones a la Ley de Estupefacientes sin tener en consideración su situación de extrema vulnerabilidad, o la posibilidad de que en realidad sean víctimas de trata de personas en la modalidad de trabajo forzoso.