Con una intervención urbana que llamará al intercambio con la ciudadanía, hoy, a las 12, en Córdoba y Corrientes, el Área de Género y Sexualidades de la Universidad Nacional de Rosario apoyará el tratamiento, en la última sesión del año del Consejo Superior, del proyecto de resolución sobre “Lenguaje no sexista e inclusivo”, una iniciativa que busca "proponer y promover usos de la lengua no sexistas, no androcéntricos e inclusivos en la comunicación institucional, administrativa y de gestión". El Consejo Superior sesionará en la sede de Gobierno, en Maipú 1065.
"Entendemos por lenguajes inclusivos a las diversas modalidades, estrategias de problematización y acciones para el desmontaje del uso sexista, androcéntrico y binario del lenguaje, creadas para reconocer nominalmente la existencia de una diversidad de identidades y subjetividades que no se reconocen nombradas en el uso genérico masculino”, indicó Luciano Fabbri, del Área de Género y Sexualidades.
La elaboración del proyecto es resultado de consensos elaborados en mesas de trabajo, y que luego de ser debatido en la comisión de Interpretación y Reglamento del Consejo Superior, llegará con consenso al recinto. Se propone "aceptar como válidas las expresiones del lenguaje inclusivas y no sexistas en las producciones escritas y orales realizadas por integrantes de los cuatro claustros de la Universidad Nacional de Rosario", como así también "habilitar la utilización de expresiones del lenguaje inclusivas y no sexistas en la comunicación institucional, administrativa y de gestión y promover el uso de estructuras de reemplazo sin connotación de género. Cada unidad académica establecerá los criterios con relación al alcance de esta norma". El último punto es "encomendar al Área de Género y Sexualidades de la Universidad la planificación de campañas de sensibilización, el desarrollo de instancias de debate y formación con los diferentes espacios institucionales de la comunidad universitaria y en articulación con organizaciones y agentes de la sociedad en general".
Por su parte, la secretaria del Área, Florencia Rovetto, consideró que “una universidad pública que se propone prevenir y erradicar las violencias sexistas no puede ignorar ni subestimar el carácter simbólico de las violencias que se expresan en las formas de comunicarnos y nombrarnos”.
