Lili vivió 18 años al lado de su hija; y ayer cumplió otros 18, sin ella. Yanina García fue una de las víctimas de los trágicos 19 y 20 de diciembre de 2001. A 18 años de aquellos hechos, ayer los familiares de los "asesinados" los homenajearon con un acto frente a los Tribunales provinciales. "La impunidad es la única respuesta que hemos tenido durante este tiempo", consideró Celeste Lepratti, hermana de "Pocho". Los nombres de Rubén Pereyra, Juan Delgado, Graciela Acosta, Graciela Machado, Walter Campos, Ricardo Villalba, Yanina García, Pocho Lepratti y Marcelo Pascini (de Santa Fe) brillaron, en amarillo, escritos sobre calle Balcarce al 1600. Por la tarde estuvieron en la ronda de las Madres en la plaza 25 de Mayo.
Las letras de contorno blanco que conformaron la palabra "justicia" fueron pintadas por familiares y militantes. Niños y niñas también daban sus pinceladas, mientras de fondo sonaba Leon Gieco: "La memoria pincha hasta sangrar...". Acompañados por organizaciones sindicales, sociales, políticas y de derechos humanos, familiares y personas cercanas a las víctimas durante la "represión desatada por la policía del entonces gobernador Carlos Reutemann", denunciaron una vez más y protestaron contra la impunidad.
"Todos los años éramos miles aquí y hoy somos los que estamos, nomás. En diciembre de 2001 hubo muertes en todo el país. Nosotros seguimos exigiendo justicia porque nadie se acuerda de lo que pasó en 2011", dijo Mari, familiar de Rubén. "Yanina -que tenía una nena de dos años- estaba mirando en la puerta de la casa cómo la gente corría y la policía disparaba, hasta que le llegó una bala. Tenía 18 años", recordó la mujer, con la foto de la piba entre las manos. También pidió que lo que sucedió "no quede en el olvido, porque antes éramos muchas personas y ahora somos cada vez menos".
Para Catalina, familiar de Delgado, "no cambió nada en estos 18 años, todos los años somos los mismos luchando y pidiendo justicia por nuestros asesinados. No vimos justicia, porque en la pobreza no hay justicia", lamentó.
La hermana de Campos recordó que el pibe tenía 16 años y "fue alcanzado por un francotirador, de la nada, cuando iba para un barrio con otro chico. Fue la primera causa que recorrió todo el circuito penal y en solo cuatro meses se consideró que el policía actuó en legítima defensa".
Claudio "Pocho" Lepratti fue otra de las víctimas que dejó como saldo el violento operativo policial. Ayer, su hermana, la concejala mandato cumplido Celeste Lepratti, recordó que "la impunidad es la única respuesta que hemos tenido durante este tiempo. Seguimos insistiendo porque la Justicia ya no vendrá de estos lugares, sino que es algo que vendrá de otro lugar que conocemos muy bien, porque hace tiempo decimos que la Justicia la hacemos entre todos". Y sumó: "Hace 18 años que venimos acá no solamente por los responsables materiales, sino también por los responsables políticos de esta masacre. A nivel provincia vemos cómo muchos personajes vuelven", lamentó. Y se esperanzó: "Ojalá a nivel nacional llegue algún tipo de acción que reivindique verdaderamente a las víctimas".
Marcha. "Los que venimos peleando en la calle todo el tiempo queríamos también conmemorar estos 18 años en la calle. No se han resuelto los problemas de fondo que motivaron el Argentinazo en el 2001, el hambre, la pobreza, el saqueo a los sectores populares", señaló Eduardo Delmonte, el dirigente de la CCC, que junto a Pueblos Originarios en Lucha convocaron la marcha que partió desde la Plaza Pringles y concluyó en la Plaza 25 de Mayo donde se realizó el acto en el que reivindicaron la pueblada de 2001, celebraron la derrota electoral de Mauricio Macri, y reclamaron por una "Navidad sin Hambre".