Una nota presentada el 11 de septiembre pasado refleja que un agente renunció como responsable del Parque Automotor del Area Operativa VIII de Salud, que involucra a Santa Victoria Este. Entre otras razones, lo hizo porque hay choferes que “manejan en estado de ebriedad”.
apuntó a las irresponsabilidades en distintas áreas y
La misiva de renuncia fue presentada ante Sergio Hid, a cargo de la administración del Hospital. El referente wichí de la zona, Gervasio Barbier, tuvo acceso a esa nota y ya solicitó junto a otros miembros de la comunidad el despido de Hid, de la gerenta del Hospital, Marcela Quispe, y de los choferes Carlos Romero y Miguel Sánchez.
El dirigente endureció sus protestas contra el Hospital tras la muerte de su hija, Belén, y de su yerno, Milton Corbalán, el 10 de diciembre pasado, cuando fueron victimas fatales de un choque con una ambulancia que manejaba Romero.
Barbier sospecha que hubo maniobras para evitar que Romero fuera sometido a un análisis toxicológico. El dirigente siempre sostuvo que los choferes del Hospital habían sido vistos manejando en estado de ebriedad.
Para respaldar su versión exhibió ahora la nota del 11 de septiembre pasado, en la que que se indica que “en algunas oportunidades los enfermeros en derivaciones se tuvieron que bajar de la ambulancia porque el chofer ingería bebidas alcohólicas”. El agente renunciante (de quien se resguarda identidad ante la posible represalia por hacerse pública su nota) entendía que esto le constaba a Quispe “porque en su guardia estuvo el chofer de guardia en estado de ebriedad”.
“Si no se toma la medida correspondiente pueden ocurrir graves problemas que después habrá que lamentar. Para (...) no ser parte de toda esta responsabilidad quiero mi renuncia al cargo designado”, fue el pedido del agente al hacer la solicitud entregada a Hid.
Suspendieron la toma
El martes último, ante la apertura de un diálogo con el Ministerio de Salud de la provincia, los miembros de la comunidad wichí que habían tomado el Hospital decidieron suspender la medida. “No se puede protestar así porque es perjudicial para la comunidad”, dijo la ministra de Salud, Josefina Medrano, al ser consultada por el caso. La funcionaria sostuvo que se trabaja en los reclamos al momento que se decide también “qué hacer con el personal del Hospital”.
Los miembros de la comunidad, por su parte, además de sugerir los despidos de cuatro agentes, solicitaron que la gerencia quede a cargo del médico Juan Casabella, y sumaron el pedido del retiro “del doctor Mogro, por ser un irrespetuoso con nuestro dolor, y haber autorizado -como médico de guardia el día del accidente-, la salida de la ambulancia con ese chofer, estando alcoholizado y con la ambulancia en mal estado”. Otro de los pedidos se basa en que los choferes sean reemplazados por miembros de su comunidad, y que la hermana de Belén, Analía, la reemplace en la tarea de traductora e intérprete en el Hospital de Santa Victoria Este.