(Desde Santa Fe) El gobernador Omar Perotti dijo ayer que el “principio rector” de las políticas públicas que propuso esta semana es la “ética de la solidaridad” con los santafesinos y santafesinas, niños y adultos, más vulnerados en sus derechos sociales, y el objetivo político, la “reactivación productiva”, en línea con el gobierno del presidente Alberto Fernández. Y adelantó que hoy enviará a la Legislatura a su ministro de Economía Walter Agosto a defender el paquete de leyes que mandó al Senado y a la Cámara de Diputados. Una propone declarar el “estado de emergencia” en cuatro áreas: “social, alimentaria y sanitaria”; “económica, financiera y fiscal”; “en las contrataciones del Estado” y “en materia de seguridad pública” y por dos años, hasta diciembre de 2021. La segunda –remitida también al Senado- es la ley tributaria que incluye una moratoria para regularizar todos los impuestos provinciales. Y la tercera, que ya estaba en Diputados es la suspensión del pacto fiscal. “La Argentina está en emergencia y Santa Fe no es una isla”, dijo Perotti a Rosario/12. “Con lo cual, no sólo debemos reconocer esta situación, sino generar las políticas” para superar la crisis, “tender una mano a los que más necesitan” y “reactivar la economía”.

Luego del cortocircuito que hubo entre Perotti con el socialismo y un sector del PJ que le aprobaron de prepo el presupuesto antes de asumir, esta será la primera batalla del gobernador en el Legislativo provincial. La expectativa en el oficialismo era, luego de la exposición de Agosto, lograr la aprobación de todo el paquete en esta misma jornada.

El 24, Perotti reunió a su gabinete por casi cuatro horas. La Casa de Gobierno estaba casi desierta por el feriado. Pero después, el gobernador se acercó a los periodistas que lo esperaban en el hall. En la reunión con sus ministros había repasado el diagnóstico en cada área y los proyectos que envió a las Cámaras, entre ellos la declaración de la “emergencia” en cuatro frentes. “Tenemos que hacer un enorme esfuerzo para resguardar” a los santafesinos, grandes y chicos, que “la están pasando muy mal”, garantizar su “asistencia alimentaria” y la salud, y al mismo tiempo reactivar el “sector productivo, sobre todo las pequeñas y medianas empresas. Para eso, es necesario “hacer un esquema de contención del gasto” en el sector público. “Es un arranque (del gobierno) difícil, pero no muy distinto al que viven las familias”, aceptó.

“Lo que deseamos es que la Legislatura nos acompañe” en el tratamiento de las leyes, con una “lectura ajustada a la realidad” de la provincia y el país. “Frente a esto, el Estado tiene que poner sus mejores herramientas” para asistir a los vulnerados. “Los tiempos corren de distinta manera. Para muchos, esperar un día” es una eternidad, porque en 24 horas "dependen si tienen alimentos o no”, si comen o no comen. “Entonces, el Estado debe ser solidario, sensible”, pero también eficaz. “La rapidez en la respuesta es clave”, dijo el mandatario.

Perotti confirmó que su ministro de Economia estará hoy en la Legislatura para explicar el paquete de leyes a diputados y senadores. Ya se reunió con la Comisión Provincial de Coordinación Fiscal y representantes de distintas instituciones del sector productivo. “Les anticipó los lineamientos de la ley de emergencia y la ley tributaria”.

“La Argentina está en emergencia y Santa Fe no es una isla”, insistió el gobernador. “La provincia no es ajena a la realidad del país”. Ponernos en sintonía significa reconocernos como parte de la emergencia”, pero también generar las políticas para “superar la crisis”. “La prioridad de los recursos del Estado tiene que estar orientada a la asistencia alimentaria, los planes sociales, la salud y la seguridad”. Para eso, es necesario hacer un “esfuerzo enorme en un esquema de contención de otros gastos y orientarlos” hacia aquellos objetivos. En ese contexto, Perotti comentó un hecho que interpretó como una foto. Un ejemplo de lo que “nunca más” debería pasar en la provincia. El gobierno de Miguel Lifschitz dejó las colonias de vacaciones del verano con 34.000 chicos anotados y centenares de docentes inscriptos, pero sin un peso para pagar la copa de leche y las horas cátedras de docentes y guardavidas. “Eso es muy duro”, dijo. Porque se necesitaban 17.000 horas cátedra. “Entonces, allí es donde hubo que reacomodar prioridades de otro lado para que esas colonias puedan funcionar y se garantice la copa de leche y el pago a los docentes. Son cosas esenciales, básicas, mínimas. Ese es un ejemplo de hacia dónde hubo que reorientar los gastos para que esas cosas no nos vuelvan a pasar nunca más”, reflexionó el gobernador.