El extitular de la Afip Ricardo Echegaray se refirió este sábado a la situación judicial vivida durante los cuatro años de gobierno de Mauricio Macri. “Viví una persecución”, afirmó en diálogo con AM750 y dijo que "Cambiemos tiró el Estado de Derecho por la ventana". También señaló que los macristas quisieron "quedarse con varias empresas a través del sistema judicial"
El extitular del ente recaudador se explayó sobre la causa Oil Combustibles, la petrolera de Cristóbal López y Fabián De Souza, por la cual se lo investiga en relación a una presunta evasión de 8 mil millones. “La evasión requiere ardid y engaño, acá había un plan de pago”, afirmó, sobre una causa en la que “para el juez Julián Ercolini y el fiscal Gerardo Policita yo sería el responsable y López y De Souza los partícipes”.
Sostuvo que “nos acusan de facilidades de pago a Oil para que no pagara impuestos y la confusión la generaron los medios”. En ese sentido, dijo que “cuando dejamos la gestión hace cuatro años, la deuda de Oil y de Indalo estaba declarada, y había un plan de pagos”. Recordó que “se habían pagado 1600 millones, lo que quedaba a pagar tenía plazos a vencer, no tenía sentido embargar, ni el caso tiene que ver con evasión”.
Consideró que “Macri quería rematar las empresas de López” y que “usaron los poderes del Estado y violentaron las reglas del sistema” para construir “un relato”. Incluso adujo que Iecsa, la constructora de Ángelo Calcaterra, primo de Macri, “también tuvo planes de pago, en 2014 y más beneficiosos que los de Oil”.
Echegaray aseguró que en estos cuatro años “fuimos perseguidos y proscriptos” y que en la Afip fue suspendido hace más de dos años. “Perdí mi trabajo y mi obra social, uno pasa a ser un muerto civil, me eliminaron de todos los sistemas bancarios”. Manifestó que “yo tuve el juicio de Oil y el de Alfonso Prat-Gay por el fraude fiscal, las cuentas sin declarar en Suiza” y que “los evasores paseaban por París y Nueva York, mientras los que estábamos en un gobierno nacional y popular fuimos a juicio.
El exfuncionario dijo que al asumir el cargo tomó “algunas previsiones" que luego al momento de enfrentar las causas judiciales en su contra le "permitieron tener la cabeza fría y buscar procedimientos técnicos para estar en libertad”. Agregó que “no fue fácil” convivir con declaraciones periodísticas que afirmaban la inminencia de su detención. “Pienso en los que se arrepintieron. Yo manejé mucha información, sabía que iba a haber presiones, no imaginé tantas. Me pongo al lado de los que dijeron cualquier pavada bajo presión, imaginen mi caso”.
Finalmente, contó que no tuvo diálogo aun con el Gobierno. “Nadie se comunicó conmigo, y no quiero sumarle mi agenda judicial”. Añadió que “comparto el trazado grueso del camino del gobierno” y que “hay que juntar masa crítica para construir”.
Expresó que colabora "con el Instituto Independencia, del peronismo, voy a las peñas, pero no hago actividad pública” y que se dedica a la apicultura con sus dos hijos varones. “Tuvimos un sistema de inquisición política con los tres poderes del Estado. A mí me tocó el oscurantismo a nivel judicial, al pueblo le tocó en el bolsillo”, cerró.