Coordinar, articular, pensar en los vínculos, escuchar y respetar los tiempos legales. Con esas ideas Alejandra Fedele trazó los objetivos que tiene en la Subsecretaría de Niños, Niñas, Adolescencia y Familia. "Muchas de las cuestiones que están sucediendo con las infancias tienen que ver con el contexto del país, con un gobierno de cuatro años que arrasó con todo un tejido social. Ahora, hay que arrancar", dijo. Y aseguró: "Cuando un niño o niña ingresa al Estado, la responsabilidad es del Estado y todos tenemos que trabajar en función de eso. Su futuro depende de lo que nosotros vamos a decidir. Queremos que tengan una vida mejor", proyectó. Si bien la funcionaria está a la espera de informes específicos sobre la situación de niños, niñas y adolescentes a cargo del Estado en toda la provincia, adelantó que actualmente hay 24 menores en estado de adoptabilidad en la ciudad de Rosario. Fedele también consideró importante repensar el programa de Familias Solidarias. 

Bajo la órbita de la Secretaría de Promoción y Protección de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes de la provincia, a cargo de Patricia Chialvo –que funciona dentro del Ministerio de Desarrollo Social y que viene manteniendo reuniones con la Defensoría de la Niñez, equipos territoriales, Fiscalía y otras direcciones relacionadas–, la Subsecretaría que ocupa Fedele desde el 10 de diciembre cumple con procurar el cumplimiento de la ley provincial 12.967. "Tenemos que trabajar en función de esa normativa", dijo la funcionaria que desde hace años recorre la realidad de los barrios más postergados de la ciudad como referente del Movimiento Evita.

En los últimos días, desde el área se inició un pedido de informes a las diferentes reparticiones relacionadas con las infancias, con el fin de conocer el estado de situación real, generar vínculos y relaciones que permitan un trabajo coordinado. Uno de los ejes tiene que ver con actuar codo a codo con los equipos municipales, para abordar situaciones incluso antes de tomar medidas excepcionales. Tras una reunión con directoras de los hogares, una de las cuestiones que advirtió es que "en los últimos dos años se tomaron más medidas de este tipo. Es un incremento de alrededor de un 40 por ciento que tal vez tenga que ver con un contexto relacionado con la crisis social, la violencia, la gente que se ha quedado sin trabajo, entre otras cuestiones que pueden incidir", dijo sobre las medidas que tienden a resguardar a menores en situaciones de riesgo, con la garantía de sus derechos como prioridad. 

Para Fedele, el trabajo que comienza desde ese momento, debe ser –sobre todo– responsable. "Cuando se toma una medida excepcional (separar a niños y niñas de su familia de origen) hay un plazo de tres a seis meses para trabajar en la revinculación". La idea es reforzar vínculos con "la Justicia y todos los organismos relacionados e intervinientes; que podamos actuar desde el inicio en todos los casos, que no lleguemos después", planteó Fedele sobre una de las líneas clave que abordará desde el área.

La funcionaria se refirió también al programa Familias Solidarias: "Hubo casos de público conocimiento en los que se superó el tiempo estipulado de la medida, y las familias terminan encariñándose, pero la normativa decía que esas familias no pueden pedir la adopción". Frente a ello planteó que "hay que repensar muchas cosas por un lado; y cumplir con los plazos por el otro". 

Fedele también manifestó preocupación sobre "una gran cantidad de familias adoptantes que hablan de recién nacidos. Eso se da en un mínimo porcentaje", aseguró. "Normalmente, los niños y niñas en estado de adoptabilidad son más grandes; muchas veces hay grupos de hermanos, adolescentes y otras cuestiones", enumeró. "Nosotros consideramos que también son los niños, niñas y adolescentes quienes eligen a las familias adoptantes. Es muy importante escucharlos, valorar los vínculos", sumó.

Fedele llegó al cargo con una propuesta clara: "Ponernos de acuerdo con trabajadores y trabajadoras que prestan funciones en relación con las infancias y adolescencia. Va más allá de los alineamientos políticos, que respeto. Mi lugar es ponerme a trabajar como todos. Estamos para cuidar los derechos de niños, niñas y adolescentes. Es un área muy sensible y el futuro de estas personas depende de lo que nosotros vamos a decidir, entonces tenemos que actuar con responsabilidad. Tenemos que ponernos de acuerdo con esto", cerró.