La complejidad, y la gravedad, del proceso judicial por Cromañón, se explica en el hecho de que hubo que realizar cuatro juicios orales para juzgar a un total de 26 personas, de las cuales 21 fueron condenadas. De ese total de condenas, sólo 18 de los imputados fueron a prisión. Casi todos los condenados ya están en libertad, salvo Eduardo Vázquez, del grupo Callejeros, que sigue preso pero por el femicidio de su esposa, Wanda Taddei. Por otra parte, sigue libre un ex inspector del gobierno porteño, cuya pena se encuentra en revisión en la Cámara Nacional de Casación.
El primer juicio
El primer juicio analizó la labor de los bomberos en Cromañón, y el cobro de coimas a empresas para extender certificados falsos de tratamiento contra incendios. Fueron condenados Alberto Corbellini, jefe de la División de Prevención de incendios de la Superintendencia de Bomberos de la Policía Federal, y Rubén Fuertes, gerente de las empresas Ipex S.A. y Bausis S.A. Esto ocurrió en febrero de 2008. Los condenaron a cuatro años de cárcel por cohecho (coimas). También recibieron condenas Luis Perucca, de las mismas empresas, a 2 años y nueve meses y los integrantes de la Superintendencia Marcelo Nodar y Marcelo Esmok a cuatro y dos años y medio, respectivamente.
El segundo juicio
El juicio de mayor repercusión pública fue el segundo, donde se investigó la muerte de 194 personas y las lesiones sufridas por 1400 asistentes al show de Callejeros. Fueron condenados Omar Chabán, gerenciador del boliche, a 20 años de prisión; el manager de Callejeros Diego Argañaraz y el subcomisario Carlos Díaz a 18 años; las ex funcionarias Fabiana Fiszbin (subsecretaria de Control Comunal del gobierno porteño) y Ana María Fernández (directora adjunta de Fiscalización y Control) en ambos casos a dos años y cuatro meses; el empresario Raúl Villareal, a un año en suspenso y a realizar tareas comunitarias. Se los condenó por “estrago doloso”. En ese juicio fueron absueltos los integrantes de Callejeros Patricio Fontanet, Eduardo Vázquez, Juan Carbone, Christian Torrejón, Maximiliano Djerfy, Elio Delgado y Daniel Cardell. La misma decisión eximió de culpa al comisario Miguel Angel Belay y el ex director general de Fiscalización y Control Gustavo Torres.
Las absoluciones fueron revocadas por la Cámara de Casación, en abril de 2011, que condenó a los Callejeros por considerarlos coorganizadores del recital. Por orden de la Cámara, el Tribunal Oral fijó nuevas penas luego modificadas por Casación: para Chabán 10 años y nueve meses para Díaz ocho años; para Fontanet siete; para Villarreal seis; para Argarañaz, Torrejón, Carbone, Djerfy y Delgado cinco años; para Cardell tres; para Fiszbin cuatro años; para Torres tres y nueve meses, y para Fernández tres años y seis meses, luego rebajados a dos años y diez meses. Fueron detenidos el 21 de diciembre de 2012. Estuvieron presos un año y ocho meses porque en agosto de 2014 la Corte aceptó tratar los casos de varios de ellos.
Quedaron en libertad los músicos de Callejeros, Villarreal y los tres ex funcionarios. Todos volvieron a prisión en abril de 2016 después de que Casación y la Corte dejaron firme la sentencia. El subcomisario Díaz, Djerfy y Fernández recibieron el beneficio de la prisión domiciliaria. El último en recuperar la libertad, en mayo de este año, fue Fontanet.
Omar Chabán estuvo cinco meses preso antes de la condena. Luego fue liberado, detenido nuevamente y otra vez excarcelado. Llegó libre al juicio oral y cuando su condena quedó firme fue otra vez a prisión. Por su estado de salud le otorgaron la prisión domiciliaria. Murió cuando tenía 62 años el 17 de noviembre de 2014.
El tercer juicio
El tercer juicio finalizó en julio de 2012. Fueron juzgados Rafael Levy, dueño del complejo donde estaba Cromañón; el comisario Gabriel Sevald y los ex funcionarios del gobierno porteño Juan Carlos López (secretario de Seguridad), el subsecretario de Seguridad Urbana Enrique Carelli, y el director del Servicio de Seguridad Privada Vicente Rizzo. El único que recibió una condena de cuatro años y seis meses fue Levy, quien hoy goza de libertad condicional.
En el cuarto juicio fue juzgado y condenado el ex inspector del gobierno porteño Roberto Calderini. Lo sentenciaron por haber cobrado coimas para habilitar Cromañón. El monto de la pena, que será de cumplimiento efectivo, está siendo evaluada todavía en Casación y por eso el ex funcionario sigue libre.