Unas veinte personas fueron atacadas por palometas durante este fin de semana mientras se bañaban en la laguna Setúbal, de la ciudad de Santa Fe. Según confirmaron las autoridades locales, la presencia del cardumen responde a las altas temperaturas y la bajada del nivel de agua que experimenta el río Paraná.
De acuerdo a la información oficial, hubo en total 12 personas heridas el viernes por la tarde y otras 8 durante la jornada del sábado. Tras los ataques, los guardavidas colocaron banderas rojas en las playas de la Costanera Este de la laguna Setúbal.
Las playas de la ciudad de Santa Fe ya tenían inhabilitado el ingreso al agua por la bajante del río que afectó de manera negativa la calidad del agua, con elevada presencia de microorganismos.
Las personas atacadas por las palometas presentaron heridas en pies y manos y no hubo casos de gravedad, por lo que recibieron curaciones y fueron dadas de alta.
Mariano Granato, titular de la secretaría de Integración y Economía Social de la municipalidad de Santa Fe, recordó que las costas de esta ciudad no estaban habilitadas como balnearios, por lo que pidió responsabilidad a turistas y vecinos de la zona.
Según explicó el funcionario, hubo “factores que se combinaron” y permitieron la presencia del cardumen, como la bajante del río Paraná y las altas temperaturas. “Hizo que estos animalitos entren en una actividad mayor”, aclaró.
“La llegada de estos peces es muy repentina. Atacan en cardumen y de forma muy voraz. Pueden arruinar la tarde de cualquier bañista”, advirtió Granato.
Un historial de ataques
Las palometas son peces carnívoros, de dientes filosos y muy agresivos que suelen realizar ataques grupales y, según señalan los especialistas, aparecen en las costas del Paraná cuando hay altas temperaturas como las registradas en los últimos días.
No es la primera vez que las palometas atacan a los bañistas en las costas de la provincia de Santa Fe. En 2017, una decena de personas sufrió heridas en pies y manos por mordeduras de estos peces mientras se bañaban en el río Paraná, en una playa de la ciudad de Rosario.
Unos años antes, en el verano de 2013, unas 60 personas -entre ellas seis menores- fueron mordidas en distintas partes de sus cuerpos por esta clase de peces. Uno de los casos más graves fue el de una nena de 7 años que sufrió la amputación de parte de un dedo de su mano.
Según el Instituto Nacional de Limnología (INALI) hay muchas especies de palometas, pero las comunes en esta zona del río Paraná son la spilopleura (conocida como piraña), la palometa brava o brillante y la nattereri (llamada mora o palometa pacusa).
