(Desde Santa Fe) 

El gobernador Omar Perotti se refirió ayer a la extensión del cronograma de pago de salarios a los agentes públicos que motivó el rechazo de los sindicatos estatales: “Los proveedores y contratistas no cobran desde hace meses, la Caja de Jubilaciones tiene un déficit enorme y la Empresa Provincial de la Energía (EPE) deudas millonarias. Santa Fe está en emergencia. Esa es la realidad y no la vamos a ocultar nunca”, advirtió. “Estamos en una verdadera emergencia, aunque a algunos les cueste reconocerlo”, tiró Perotti en relación a la oposición que días atrás bloqueó el proyecto de emergencia en la Cámara de Diputado. 

Al mismo tiempo, el gobierno dio a conocer que dispuso que la Empresa Provincial de la Energía posponga hasta el viernes 17 de enero el plazo para pagar sin recargo las facturas por consumo de energía eléctrica. Aclaró que "es necesario que los usuarios realicen las gestiones en las oficinas comerciales de la empresa".

También gestionó ante el Nuevo Banco de Santa Fe que no cobre en el mes de enero los intereses compensatorios y punitorios a las tarjetas de crédito por los días de mora entre la fecha de vencimiento de la tarjeta y la fecha de cobro de los haberes.

“La situación más difícil es la que vivimos hoy”, alertó Perotti. “Cuando decíamos que la mejor transición (con su antecesor) era que dejara plata para pagar los sueldos y aguinaldos, lo decíamos porque la proyección (del desplome) daba esto. No iba a alcanzar la plata”. Lifschitz “no dejó plata ni para pagar los sueldos y aguinaldos”, denunció.

“La decisión” de extender pago de salarios públicos fue “dura y difícil”, admitió Perotti. “Somos conscientes que genera dificultades a los trabajadores”, pero el objetivo es cumplir ese compromiso con recursos genuinos de la provincia y “no con plata prestada por bancos que nos cobran un 70% de tasa de interés”. “Lo que tendría que haber hecho (Lifschitz) es dejar previsto que esas cosas no pasen”, lo volvió a acusar.