El ministro de Justicia de Turquía, Abdülhamit Gül, confirmó hoy la prisión preventiva de cinco personas por la fuga del ex presidente de Renault-Nissan, el brasileño Carlos Ghosn, que escapó de su arresto domiciliario en Japón y reapareció en Líbano. Se trata de cuatro pilotos y un empleado de la empresa MNG Jet. Las naves fueron inmovilizadas por orden de la fiscalía turca.

El funcionario dijo además que “hay dos individuos extranjeros que hicieron tránsito” y que “sobre este tema se están tomando declaraciones y las investigaciones continúan”. Con lo cual son siete en total las personas involucradas en la fuga de Ghosn. Todas habían sido detenidas cuando estalló el caso y ahora se acciona con la prisión a cinco mientras se investiga a las otras dos.

Las pesquisas analizan dos vuelos. Uno de ellos, un Bombardier Global 6000 TC-TSR que voló de Osaka, Japón, a Estambul. El segundo vuelo, un avión privado, un Bombardier Challenger 3000 que salió de la ciudad turca 45 minutos más tarde con destino a Beirut, la capital de Líbano.

Ghosn estaba bajo arresto en la capital nipona desde hacía poco más de un año, acusado de malversación de fondos. Al parecer, escapó dentro del estuche de contrabajo de un músico luego que una banda fuera a tocar a su casa El empresario tiene ciudadanía libanesa y no hay tratado de extradición entre ese país y Japón. Ghosn se encargó de aclarar desde Beirut que él organizó la fuga y exculpó a su familia de toda responsabilidad en la organización del escape.

El empresario de 65 afrontaba la posibilidad de una condena a diez años por una causa que continúa su trámite en Tokio. Alegó que en Japón no contaba con las debidas garantías para justificar su huida. Se ignora la identidad con la que escapó y con la que hizo transbordo en Estambul. Es que sus tres pasaportes, brasileño, francés y libanés, estaban en manos de las autoridades niponas. Líbano adujo por su parte que ingresó de manera legal.

En tanto, MNG Jet adujo que apenas se supo la fuga inicio una querella criminal por “uso ilegal” de sus servicios chárter hecho por Ghosn y confirmó que uno de los empleados, investigado a su vez por la justicia turca, reconoció haber falsificado los registros de vuelo. “Confirmó que actuó de forma individual sin el conocimiento o la autorización de la compañía”, afirmó la empresa en un comunicado.