El presidente Alberto Fernández salió a respaldar al gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, cuya vivienda fue el blanco de un “escrache” de un grupo de personas que reclamaban por la muerte de un joven. "No debemos tolerar a los violentos que insultan y escrachan, cualquiera sea la motivación que los impulsa a hacerlo”, afirmó el mandatario.
"Llegó la hora de construir un tiempo de respeto mutuo", definió el Jefe de Estado a través de su cuenta de Twitter, en la que expresó su “solidaridad” con el gobernador justicialista.
El hecho al que se refirió Fernández ocurrió el jueves pasado, en la vivienda que Perotti tiene en la ciudad santafesina de Rafaela. Ese día hubo una movilización para reclamar “justicia” por Gonzalo Glaria, un joven de 26 años que murió el martes pasado luego de caer de una moto cuando perseguía a supuestos ladrones.
La marcha tuvo lugar en el centro de esa ciudad pero, al finalizar, un grupo se dirigió hasta la vivienda particular del gobernador y arrojó huevos, rompió ventanas y pintó la fachada. “No puede haber más víctimas de la locura”, remarcó el Presidente en referencia a ese hecho.
Perotti sostuvo que ese “escrache” pudo haber sido cometido por “gente que aprovechó la situación" y agregó: "Todos conocemos los actores y cada uno sacará sus conclusiones. Yo me quiero quedar con el hecho de que la gente se hartó y se manifestó en contra de años y años de inseguridad".
"Cuando hay dolor uno acompaña el dolor, en este tipo de cosas se debe resguardar y no cargar las tintas. Soy muy respetuoso de estas situaciones", aclaró.