El ministro de Educación, Nicolás Trotta, anunció que el Gobierno convocará a la paritaria nacional docente a mediados de este mes. Este espacio de negociación con los gremios está destinado a fijar el salario inicial de los maestros para todo el país y acordar políticas nacionales que mejoren la calidad educativa, como la formación docente gratuita. Durante la gestión de Mauricio Macri, la paritaria nacional había sido eliminada: la última vez que se realizó fue en el verano de 2016.
Los gremios remarcaron el valor de esta decisión que, definió Roberto Baradel (secretario adjunto de Ctera), "recupera el rol del Estado nacional en el sostenimiento de la educación pública, en conjunto con las provincias”.
Trotta dijo que desde el ministerio nacional vienen hablando con los gobernadores "para tener una construcción colectiva" en educación, que apunte "no sólo a discutir salarios sino también a diseñar una agenda federal, en común con los ministros de las provincias". En cuanto al monto del aumento salarial, indicó que su discusión va a producirse "en una situación fiscal muy compleja que atraviesan el gobierno nacional y muchas provincias", pero la consideró un ejercicio necesario".
"Estamos buscando la mejor alternativa para que en marzo todos los estudiantes estén en las aulas y todos los profesores dictando clases".
Baradel: "Hay que avanzar en la doble escolaridad"
Desde el principal gremio docente, Roberto Baradel, secretario adjunto de la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera), consideró que la recuperación de la paritaria nacional "vuelve a poner en el centro, como prioridad, a la educación pública y recupera el rol del estado nacional en su sostenimiento, en conjunto con las provincias”.
El dirigente señaló a PáginaI12 cuáles son los temas que la Ctera quiere llevar a la paritaria junto con la discusión de salario inicial. Ellos son la "inversión en el mantenimiento y construcción de escuelas, formación docente, salud laboral docente, definir medidas para mejorar la asistencia de alumnos y docentes y avanzar en la extensión de la jornada escolar", para que más escuelas sean de jornada completa.
También adelantó que pedirán al gobierno nacional la recuperación de las políticas socioeducativas. “Queremos que vuelvan a implementarse porque hay muchas familias que no están en condiciones materiales de sostener la escolaridad de los chicos. Ahí el Estado tiene que hacerse presente desde la escuela, con la entrega de guardapolvos, zapatillas, netbooks y programas que incluyan e integren a los chicos en materia pedagógica y educativa”.
A su vez, Eduardo López, secretario gremial de Ctera, apuntó que en estos tres años sin paritaria "se discontinuó todo: no se construyeron escuelas, no se capacitó a los docentes, bajó el salario de los maestros, sacaron las orquestas escolares, y el plan de lectura". "Lo único bueno que hizo el macrismo en educación fue demostrar qué pasa cuando no hay paritaria", definió. De la misma manera, lo sucedido demostró "que en la paritaria los docentes no solamente pedimos salario, sino educación de calidad de calidad para todos".
Desigualdades provinciales
Una de las cuestiones para la que la paritaria nacional resulta clave es auxilio a las provincias con menores recursos para pagar los salarios. Trotta dijo que viene hablando con los gobernadores para tener en cuenta "la necesidad de cada una de las jurisdicciones, porque algunas tienen una situación fiscal muy difícil".
Para dar una idea de la disparidad entre distritos vale mencionar que hay provincias donde los docentes tuvieron aumentos por encima de la inflación, como La Pampa, y otras que no están pagando a tiempo los sueldos, como Chubut.
Sobre el conflicto docente en esta provincia --donde desde mediados del año pasado hay fuertes reclamos por los incumplimientos en el pago de los salarios--, el ministro afirmó que las autoridades nacionales esperan que "en las próximas semanas se pueda encontrar una solución".
El titular de Educación recordó que la eliminación de la paritaria nacional docente dejó a muchas provincias desatendidas, que recibieron menos fondos de la Nación. A esto se sumó que el macrismo redujo la inversión educativa alrededor de un 1 por ciento en términos del PBI.
La ley de establece que el Estado debe destinar el 6 por ciento del Producto Bruto Interno a Educación. Sin embargo, en 2019 esa inversión estuvo entre el 4,8 y 4,9 por ciento, de acuerdo a los datos del ministerio.
El Instituto Marina Vilte, de Ctera, detalló que durante la gestión macrista, por el ajuste en el presupuesto para Educación, se redujeron en un 36 por ciento las acciones de formación docente, un 69 por ciento los fondos para edificios de jardines de infantes, un 69 los destinados al plan de educación digital y un 77 por ciento los de infraestructura escolar.