La temporada teatral marplatense tiene con qué ilusionarse. A la masiva afluencia de turistas a la ciudad balnearia, se le suma el muy buen comienzo en las taquillas de las obras teatrales que invaden "la feliz" por estos días. "Las primeras semanas nos indican que el piso base de crecimiento de venta de entradas es del 17% para esta temporada teatral veraniega, en relación a la pasada"
, anticipó el empresario teatral Carlos Rottemberg en Detrás de lo que vemos, el programa de los mediodías de la AM 750. Según el borderó, la cantidad de entradas vendidas en diciembre duplicaron a las del mismo mes de 2018. "Además, no hay ninguna sala con espacio este verano", subrayó el teatrista, oponiendo esa realidad con la de los últimos años, donde muchos teatros permanecieron cerrados.
Los números de la temporada teatral en la principal ciudad balnearia son contundentes: los datos suministrados por la Asociación Argentina de Empresarios Teatrales y Musicales (A.A.D.E.T.) confirmaron un alto crecimiento en el total global de espectadores teatrales para diciembre contra el mismo mes del año anterior: de 5.000 en 2018 a más de 10 mil en 2019. Y la primera semana de enero sigue la misma tendencia.
"En nuestro rubro el salto fue muy alto. Ya auditada por la AADET, la primera semana de enero sigue mostrando, semana contra semana, que estamos por encima del año pasado. Lo mismo sucederá durante esta semana que estamos atravesando, según se desprenden de las preventas. Las libretitas están indicando un piso base de crecimiento de ventas de entradas para la temporada completa del 17%, con posibilidades de crecer aún más", señaló Rottemberg, dueño de 16 salas teatrales distribuidas entre la ciudad de Buenos Aires y Mar del Plata.
Otro gran augurio de la temporada lo marca el hecho de que por primera vez en los últimos cuatro años todas las salas teatrales marplatenses están abiertas y ocupadas. "Este año se completaron todas las salas", puntualizó Rottemberg. Y contó cómo hubo una relación directa entre los resultados electorales del año pasado y el desarrollo de la voluminosa temporada teatral marplatense.
"Que cada uno le dé el tinte político que quiera, pero yo voy a los números: hasta las PASO del 11 de agosto, solo había confirmada una obra, que era Desnudos. Al punto tal, que en mi empresa señalaba que íbamos a tener que hacer como en 2017, que fue la peor temporada de la historia en Mar del Plata, cuando directamente tuve que cerrar un complejo con tres salas. Parecía que no había clima de los actores para ir. A partir del sábado 17 de agosto, a seis días de las PASO, fue una catarata de obras que se fueron confirmando para la temporada. A punto tal, que el 15 de septiembre, que las salas estaban tan colmadas que gente como José María Muscari, que quiso traer un éxito de Buenos Aires como fue Sex, ya no pudo hacerlo porque estaba todo programado. No hay ninguna sala con espacio este verano en Mar del Plata", detalló.
"No es que las PASO resolvieron el mundo, pero sí después de las PASO hubo un clima en el mundo artístico por el cual apostaron a Mar del Plata, y que hace que hoy se tenga una cartelera plagada de nombres propios", argumentó Rottemberg.
Hay otros tres detalles puntuales que también contribuyen a la suma estadística a favor. Por un lado, los referidos estrenos anticipados de más compañías en la semana previa a Navidad (contra solo uno del año anterior). Además, el hecho que en 2020 la celebración de Carnaval impacta en la segunda quincena de febrero y no en marzo como en 2019. Otro punto a favor de las expectativas positivas para la temporada tiene que ver con “la yapa” de un sábado 29 de febrero, por ser año bisiesto.
Si bien los motivos del crecimiento en la taquilla son variados, el empresario que ya lleva 42 temporadas ininterrumpidas programando obras en la ciudad de la Costa Atlántica subrayó que hay más y mejor oferta teatral, además de muchos más turistas veraneando por Mar del Plata. En este punto, la economía y las expectativas parecen haber sido dos factores fundamentales para que más público se vuelque al teatro.
"No hay dudas de que las primeras medidas económicas, entre ellas el dólar alto a los efectos del turista que sale al extranjero, tuvieron que ver. Y tiene que ver con un tema de expectativas, también", detalló. "La gente no sabe si le va a ir mejor, pero se siente mejor. Hay una cosa que se llama expectativa, que no es que te acomoda el bolsillo cuando te falta la plata, pero empieza a mover la rueda de manera diferente", afirmó.
Conocedor del paño, Rottemberg contó un ejemplo que explica la importancia no sólo cultural sino económica y laboral del teatro: "Tuvimos que abrir el pullman en una sala donde se da la obra Desnudos -pullman que no abrimos en los tres años anteriores-, que nos obligó en diciembre a tener que tomar más gente, a tener que llamar a la empresa que hace la limpieza de la sala para pedirle a dos personas más de refuerzo. Este ejemplo chiquito del teatro, para aquellos que creemos en la producción y no creemos en la especulación, para quienes creemos que el trabajo puesto al servicio de la ciudadanía es el que nos enriquece a todos, estoy convenido que sirve para llevar a la macro economía: es lo que le tiene que pasar al país".
En cuanto a las obras preferidas por los turistas, el gerente de los teatros Lido, Bristol, Neptuno, Mar del Plata, Atlas y América de Mar Del Plata detalló que "siempre en el mundo el género más buscado es el de obras acerca del sentimiento y del humor", y que en los veranos "en general el humor le gana al sentimiento".