Damián Musto (foto) acordó el pasado viernes su continuidad en el club hasta julio, pero durante el fin de semana se arrepintió. Ahora el volante está decidido a dejar Arroyito en las próximas horas para irse a Gremio, de Brasil. La oferta que tiene el volante central es un contrato por tres años a cambio de dos millones de dólares, duplicando los números de su actual vínculo en Central. El ex Olimpo de Bahía Blanca tiene vínculo con los canayas hasta julio de 2018, pero a su favor cuenta una cláusula de rescisión por valor de un millón y medio de dólares que el club de Porto Alegre está dispuesto a pagar. Por lo tanto, lo que puede hacer la dirigencia de Central es persuadir al jugador para que no acepte la propuesta, algo que anoche parecía improbable ante la determinación que se mostró Musto para irse a Brasil. A favor de Central cuenta en la letra chica del contrato que la cláusula de rescisión se puede ejecutar recién en junio. Y por eso anoche la directiva auriazul negociaba con Gremio un monto cercano a los dos millones de dólares para desprenderse del jugador. Gremio tiene tiempo hasta el jueves para inscribir al mediocampista, dado que ese día debuta en Copa Libertadores y una vez presentada la lista de jugadores a Conmebol no se pueden agregar más nombres. Entre hoy y mañana se definirá el futuro de Musto, quien ya tomó la decisión de irse de Central y ayer se lo hizo saber a los dirigentes. Esta transferencia permitirá al equipo de Paolo Montero solicitar una plaza para sumar un refuerzo aunque la directiva desestima esta opción de buscar un reemplazo, al menos hasta el receso de invierno.