En el marco del Plan Argentina contra el Hambre, los municipios comenzaron a organizar ferias de economía popular, con alimentos saludables a precios accesibles, elaborados por cooperativas, pequeñas y medianas empresas y productores de la agricultura familiar. Leche, yogurt, verduras, frutas, pescado, yerba y arroz --entre muchos otros productos-- empezaron a ser comercializados en las zonas de distribución de la Tarjeta Alimentar. PáginaI12 estuvo en la feria instalada en José Leon Suárez por la intendencia de San Martín y el Ministerio de Desarrollo Social. Allí los lácteos y las frutas fueron los productos más demandados.
“Hacía meses que no compraba leche; a mi nena la tenía a té”, contó en el puesto de los lácteos Vanesa Conde. Estaba con Sofía, de cinco años, y con su mamá, Liliana, ya jubilada. Se llevaron además yogurt, en el puesto de las verduras cargaron acelga, lechuga y cebolla y agregaron antes de volver a casa un kilo de merluza. Habitualmente el presupuesto no les da para más que una dieta de fideos y arroz.
El objetivo de estas ferias es llegar a los barrios con mejores precios. Entre 2016 y 2018, por la inflación de los alimentos, en el país se duplicó la cantidad de personas sin posibilidad de comprar una canasta básica. Según el Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad de Avellaneda, ese número superaba en agosto, antes de la devaluación posterior a las PASO, los 5 millones de argentinos.
En los puestos se ofreció a la venta leche a 35 pesos el litro (la de Precios Cuidados está a 40), pan a 60 pesos (en la panaderías se vende a 100), merluza congelada a 199, zapallitos y naranjas a 18 pesos. También productos regionales, como aceite de oliva y conservas envasadas, y todo lo que habitualmente entra en una lista de almacén. Un elemento clave es que fue habilitada la posibilidad de comprar con la tarjeta.
“Estamos trabajando para ampliar el uso del posnet dentro de la economía popular”, explicó Eva Verde. Fundadora de la comercializadora alternativa MeCoPo, del Frente Darío Santillán, Verde es una militante que pasó a la gestión. Desde diciembre se desempeña en la Dirección Nacional de Comercialización, dentro de la Secretaría de Economía Social que conduce Emilio Pérsico, en el ministerio a cargo de Daniel Arroyo. “Cuando supimos que en San Martín iba a comenzar a entregarse la Tarjeta Alimentar le propusimos a Oscar Minteguía (secretario de Desarrollo Social de San Martín) armar esta movida. El convocó a todas las organizaciones territoriales, hicimos una mesa en la que acordamos este sistema y vimos qué llevaría cada uno a la feria, para complementarnos. El municipio puso a disposición el espacio y armó los gazebos. Son cosas que se pueden hacer con poco presupuesto y que generan una posibilidad para la economía popular”.
Los almacenes del Buen Vivir (del MP La Dignidad), el Mecopo, Vía Campesina (del Movimiento Evita), Alimentos cooperativos y la cooperativa 7 Espigas, de Proyecto 7, son algunos de los que montaron puestos. La feria fue ubicada junto al local en el que se están distribuyendo las las 11 mil 400 tarjetas Alimentar destinadas al distrito. Su asignación es por día, desde este lunes hasta el jueves, y la feria permanecerá en el lugar por ese período.
“En la cooperativa 7 Espigas trabajan diez compañeros. Trajimos 100 kilos de pan a 60 pesos, prepizzas, cremonas y medialunas. Se vendió muy rápido. Aunque para esta semana no sumamos más personas a la panadería, porque esta es la primera, la idea es justamente esa: en la medida en que podamos vender, vamos a generar más puestos de trabajo. Queremos que haya ferias en CABA y en el primero y segundo cordón del conurbano”, planteó Horacio Avila, coordinador de Proyecto 7, organización integrada por personas en situación de calle.
José Gazpio, del MP La Dignidad, completó la idea: “La apuesta es capturar una parte, un porcentaje, de las ventas de la Tarjeta Alimentar, que de otra manera iría por completo a las grandes cadenas de supermercados y a los oligopolios de la alimentación. Con eso nosotros podemos generar más empleo, porque usamos mano de obra intensiva. Y es dinero que queda en el mercado local”.
Entre las cooperativas que pusieron sus productos en los puestos hubo cooperativas de yerbateros, molinos recuperados, quintas de la agricultura familiar y cooperativas lácteas de la zona de Rosario. Los pescados eran de una empresa de Mar del Plata y la mayoría de las conservas de emprendimientos de comedores y merenderos. Todos señalaron que sus precios no eran promocionales, sino los que les permiten sostener sus fuentes de trabajo.
“El gran problema del sector es la comercialización. Nosotros no llegamos a la góndola de los supermercados por los acuerdos entre las cadenas y los grandes productores alimenticios; esa estructura comercial asociativa se replica a nivel mundial”, señaló Ignacio Vila, de Alimentos Cooperativos.
Entre los consumidores, algunos indicaron que sólo tienen como opción algún supermercado chino o un kiosco sin Precios Cuidados. “Estamos en el barrio de la Cooperativa Nuestra Esperanza, de Avenida Colón y Reconquista, en Villa Ballester. Para ir a comprar sólo hay un chino con precios carísimos. En el kiosco, al sachet de leche lo tienen a 65 pesos. Para llegar a un lugar con los precios más o menos normales tenemos que caminar hasta la Ruta 8."
Las 11.400 tarjetas que se distribuirán en San Martín implicarán el ingreso de casi 50 millones de pesos mensuales para la localidad. “Vamos a trabajar para que la gente conozca y elija este tipo de productos”, aseguró Minteguía, el secretario de Desarrollo Social de San Martín. El municipio viene desarrollando políticas de apoyo a la economía popular y, en particular durante este año, busca avanzar en medidas que garanticen el acceso a los alimentos.