En 2015, cuando este grupo de mujeres comenzó a reunirse para jugar al fútbol, tuvieron que pensar una denominación que las representara. El nombre surgió como el símbolo de lo que sentían: la militancia como motor de vida. En La Plata, donde juegan y viven, desde entonces, Las Descamisadas Fútbol Club patean y pelean por un mundo más justo. Con Eva Perón y su frase como bandera y con el madrinazgo de la Madre de Plaza de Mayo Taty Almeida.
“Nos entendemos militantes del campo nacional y popular, y elegimos el nombre con que Evita se refería con tanto amor a su pueblo. Nuestra casaca tiene los colores de la Juventud Peronista, el verde y el azul, y estampamos en el corazón la cara de nuestra guía espiritual, Evita”, cuenta la capitana Valeria Monetta, a quien apodan la Muralla, por su solidez en la defensa.
Las Descamisadas llevan cinco años de camino. En este tiempo comprendieron que jugar al fútbol significó apropiarse de un terreno acaparado por varones. Y no sólo para jugar por jugar: “Nos dimos cuenta que era un espacio de acumulación política, que muchos varones utilizan para ‘rosquear’ en ámbitos de militancia –explica Paula Guala–. Entendemos que hay que apropiarnos de determinadas prácticas para transformarlas en clave feminista. Así que el fútbol apareció como un nuevo espacio para disputar. Decidimos entrar sin pedir permiso”.
Una vez en la cancha y con una pelota en los pies, este grupo de mujeres sabe que el fútbol es una excusa también para luchar y visibilizar otras consignas. Así, llevan banderas de distintas luchas a cada partido. "¡Higui libre!", fue una de las proclamas. Y también: "¿Dónde está Johana Ramallo?, ¿Dónde está Santiago Maldonado? o ¡Evo es pueblo!". En la campaña electoral de 2019 su consigna en La Plata fue: "¡Boleta completa!”. Además, nunca faltan los pañuelos verdes a favor del aborte legal, seguro y gratuito.
"Somos feministas, militantes en distintos frentes universitarios, secundarios, territoriales. Y esa convicción de 'en la cancha como en la vida' va totalmente de la mano con la lucha de las Madres y Abuelas, y con todo lo que sintetizan Evita y Cristina", refuerza Agustina Cara.
Con esa premisa eligieron a Taty Almeida como madrina. Durante el Encuentro Federal de Derechos Humanos que se realizó el año pasado en la Ex ESMA le entregaron la camiseta con el número 9. Fue en homenaje a su lucha y resistencia. Taty aceptó encantada. Unos días después les mandó un video con la casaca puesta: "Mis queridas ahijadas, estoy fascinada. ¡Vivan las mujeres!", las arengó.
Cuando recuerdan sus inicios Las Descamisadas cuentan que en la cancha no fue sencillo. "Los primeros encuentros fueron un desastre, para qué mentir –dice Agustina Cara–. Terminábamos muy golpeadas, todas en círculo persiguiendo la pelota. No existía ningún criterio, ninguna técnica. Pero mejoramos, tuvimos un DT (Emiliano Castearena), empezamos a participar en torneos, a entrenar más. Crecimos. Y acá estamos".
Actualmente, "Las Descas" cuentan con una directora técnica, Candela Vilches, quien se lesionó y pasó a dirigir (hoy además juega en Alumni, en la Liga Amateur Platense). "Calu", como le dicen, afirma que tener a una mujer a cargo del equipo fue "un gran crecimiento". "Existe una comodidad distinta y un aprendizaje que tiene que ver con mantener cierto compañerismo; escuchar a todas me ayuda a la hora de pensar cómo se para ese equipo en la cancha. Intentamos respetar las formas de juego de cada una e ir explotando sus cualidades para lograr los mejores resultados", dice.
Lo cierto es que el equipo ya fue campeón. La organización del campeonato les acercó el día de la consagración un cartel con la leyenda "¡Felicitaciones Campeones!", un souvenir que se daba todos los años. Ellas, precavidas, habían llevado la letra A para pegar sobre la E. "Son pequeños espacios que vamos ganando dentro de un deporte históricamente machista y desigual", marca Valeria.
A Las Descamisadas FC lo completan Ayelen Cussi, Rocío De Oliveira, Paula Beriay, Ariana Balzacca, Sofia Tiero, Trinidad Mazars, Rocio Pieruzzini Cid y Natalia Pepe. Y otras compañeras que las acompañaron desde el primer momento: Manuela Hoya, Luciana Morini, Daiana Zapata, Soledad Barrenechea, Florencia Gil, Florencia Beriay y Daniela Gonzalia.
"Recuerden que lo importante es competir", les dijo Taty Almeida en aquel video que les envió. Más allá del resultado, ya todos y todas saben que cuando les piden una foto a Las Descamisadas hay una única forma de posar para las jugadoras: con los dedos en V.