El gobierno nacional salió a analizar, a través de varios de sus ministros, la jornada de movilización de la CGT, en la que los dirigentes sindicales volvieron a amenazar con un paro, pero sin poner fecha. El triunvirato de Acuña, Daer y Schmid pidió cambios en el modelo económico; cosa que los funcionarios de Cambiemos relativizaron al poner en el marco del año electoral.
El presidente Mauricio Macri se mantuvo en silencio en la quinta de Olivos, pero varias de sus espadas salieron a opinar. Por Twitter, el Jefe de Gabinete Marcos Peña afirmó que “muchos dirigentes gremiales no están siendo lo más francos posibles sobre el rumbo económico del país”, y agregó que “la política electoral se está mezclando con la agenda de trabajo”. También aseguró que “creemos firmemente que hay mucho trabajo por realizar y que el diálogo constructivo da sus frutos. Las puertas están abiertas”.
Por su parte, el titular de la cartera de Trabajo, Jorge Triaca señaló que “acá corre un año electoral y el peronismo busca la identidad detrás de la defensa de los derechos de los trabajadores”.
Quien retrucó los discursos de los líderes cegetistas fue el ministro de la Producción, Francisco Cabrera. Vía Twitter rechazó que haya habido una apertura en las importaciones. “No hubo ni habrá avalancha de importaciones: en 2016 cayeron 7% respecto del 2015. Los datos desmienten a la CGT”, y puntualizó que “creamos empleo después de años de perderlo”.
Guillermo Dietrich, ministro de Transporte, rechazó la posibilidad de un paro, dado que “no lleva a ningún lado, es un costo para el país y genera conflictividad en un entorno en el que estamos siempre abiertos al diálogo”. También consideró que “el empleo se está recuperando, la economía, después de 5 años de estancamiento, está creciendo”, y resaltó que “cada uno de los dirigentes sindicales conoce esto”.