Cosquín nunca pasa inadvertido. Siempre es motivo de discusiones, lecturas y controversias. No por nada es el festival de folklore más importante del país y, algunos dicen, de Latinoamérica. Por eso, cada cosa que sucede en torno a Cosquín toma especial dimensión y más aún en vísperas de una nueva edición. No será cualquier edición. Este sábado, el festival cordobés dará comienzo a su 60° edición, que contará con diez lunas, una más de lo habitual. "Esta va a ser una edición histórica y las expectativas son las mejores. Va a quedar marcada por las emociones, porque regresan artistas consagrados y se suman nuevos valores. Un Cosquín representativo, amplio, federal y popular", entiende Luis Barrera, secretario de programación de la comisión municipal de folklore de Cosquín.
Entre esos nombres “consagrados e históricos” a los que hace alusión, aparecen artistas que, en su mayoría, tienen que ver con una línea tradicional del folklore: Los Manseros Santiagueños, Por Siempre Tucu, Carlos Di Fulvio o Los 4 de Córdoba. También estará Raúl Barboza, y Teresa Parodi compartirá escenario con Víctor Heredia, para presentar el disco Tu voz es mi voz, grabado en vivo en el teatro Coliseo en 2018. Y, además, habrá un homenaje al Chango Nieto y otro a Chabuca Granda por los cien años de su natalicio, a cargo de las cordobesas Mery Murúa, Paola Bernal y Juan Iñaki. Además, habrá presencia de artistas más actuales o surgidos en los últimos años: José Luis Aguirre, Micaela Chauque, Pachi Herrera, Franco Luciani, La Callejera, Oreellana-Lucca, Bruja Salguero o el proyecto Sureras (Lucía Ceresani, Marta Suint, Karen Arranz, Mariela Acevedo y Susana Repetto), entre otros.
Una de los conciertos más esperados será el de Fito Páez, quien se presentará por primera vez en la Próspero Molina, en la cuarta luna. “Si bien no es un artista del riñón del folklore específicamente, si tiene que ver con la música popular argentina. Además, ha grabado con Liliana Herrero y Mercedes Sosa”, dice Barrera. “Hace un tiempo que Fito tenía ganas de participar en Cosquín. Nos pusimos en contacto y tuvo siempre toda la predisposición para sumarse”, cuenta el funcionario. “Ahora le va a tocar representar en el escenario a algunas de sus obras, que se han cantado mucho aquí, y algunas de otros autores”, completa. Entre las perlitas, se sumará una décima luna cuartetera, con La Mona Jiménez como cierre estelar. Y se confirmó la presencia de artistas taquilleros como Abel Pintos y Jorge Rojas, que estaban en duda.
"Es una alegría enorme que nos hayan invitado. Entendemos que el folklore es un género complejo y que se toca y canta muy bien, por eso estamos ensayando mucho. León Gieco, además, hace unos días nos dijo que este festival es muy importante", dice Willy Piancioli de Los Tipitos, quienes también tocarán por primera vez en el festival y presentarán su disco de folklore De mi flor (2019), producido por Lucho González. Para La Charo, quien presentará una propuesta que combina cantos originarios y música electrónica, “la intención es aportar una mirada artística renovada sobre nuestra tradición y apostar siempre al riesgo”. “En el espectáculo, me acompañarán bailarines del Teatro Colón y de la compañía Pucará, porque mi idea es darle importancia a la danza en este escenario. Un cruce entre lo clásico y lo folklórico”, cuenta.
La vientista y compositora salteña Micaela Chauque, por su parte, presentará en la sexta luna el disco Jallalla, ganador de un premio Gardel. “Estar en esta edición me hace sentir presente en la historia, porque antes de mí en este escenario han tocado grandes intérpretes de la música folklórica andina, como Jaime Torres o Uña Ramos”, destaca Chauque. E introduce el debate sobre el cupo femenino en festivales, que no se está cumpliendo en la mayoría de las grillas. ”En el norte argentino se nota claramente el incumplimiento de la ley. Espero que los festivales puedan readaptarse mucho más rápido y que se note la mayor presencia de mujeres artistas en todas las programaciones”.
La Ley de Cupo Femenino en Festivales fue promulgada por el poder Ejecutivo el 22 de diciembre y en este momento el Instituto Nacional de la Música (Inamu) está redactando la normativa de fiscalización, “que es lo necesario para que todo el mundo tenga en claro cómo se tiene que cumplir ésa ley”, entiende Celsa Mel Gowland, una de las impulsoras de la ley y ex vicepresidenta del Inamu. Según la normativa, que ya está vigente, el cupo femenino se cumple cuando la grilla está integrada “en un 30 por ciento por artistas solistas y/o agrupación musical compuesta por integrantes femeninas y/o agrupaciones musicales mixtas”, es decir, cuando “la presencia femenina implique un mínimo del 30 por ciento sobre el total de sus integrantes”.
Según la comisión de Cosquín Folklore, el festival alcanza el 30 por ciento de representación femenina y cumple con la ley. Luis Barrera apunta que esta edición cuenta con un total de 102 propuestas artísticas, de las cuales 30 están integradas por mujeres, teniendo en cuenta ganadores del Pre-Cosquín, Postales de Provincia, artistas aún sin confirmar y los ballets mixtos. Según pudo relevar Página/12, el porcentaje de presencia femenina rondaría el 26 por ciento. Pero los números, sí, son muy finos. De todos modos, se percibe un interés de la Comisión por cumplir con el cupo y ampliar el espectro artístico. "El cupo está totalmente cubierto", resalta Barrera. "Hay que seguir charlando el modo de contabilizar. Hay espectáculos que no se suele contemplar, como delegaciones provinciales, ganadores de Pre-Cosquín, grupos de baile o artistas sorpresas. Revisamos la ley con un abogado y estamos tranquilos. Lo hemos trabajado mucho", fundamenta el programador. “Y además las propuestas (integradas por mujeres) que están son por una cuestión artística, que merecen estar más allá del género, no para cumplir con un número”, agrega.
“En algunos festivales no se llega ni al 1 por ciento. Creo que todos los festivales van a tener que adaptarse a los tiempos que corren y dar respuestas a este reclamo que surge desde una sociedad que está cambiando y quiere ser más justa”, apunta La Charo. "Hay un cambio en lo simbólico y va a haber un cambio en los hechos, que por supuesto no va a venir de un día para el otro. La ley no es una solución a todas las desigualdades que existen en el ámbito de la música para las mujeres, las disidencias y las diversidades, pero sí es una herramienta que va a impulsar mucho la actividad de las artistas y esperemos que se cumpla rápido”, explica Mel Gowland. “El Inamu ya está trabajando fuertemente para tener la normativa para su aplicación y muy pronto se estarán fiscalizando los festivales, porque necesitamos multiplicidad de voces y distintas miradas desde esos escenarios", cierra la música.
La grilla completa en http://aquicosquin.com.ar