Concejales rosarinos, legisladores, funcionarios. En los últimos días, el gobernador Omar Perotti concentró, para sostener su tan ansiada ley de Emergencia, el aval de diversos sectores del peronismo. Al igual que él, también los necesita el ministro de Seguridad Marcelo Sain, merecedor de los dardos progresistas por su verba picante.

En ese tren, el diputado nacional Germán Martínez remarcó que dentro del justicialismo santafesino hay diferentes “intensidades” a la hora de defender, de poner el cuerpo por el gobierno provincial. “Si el plan Sain fracasa, no sólo va a ser una enorme pérdida de capital político para el gobernador, sino que todo lo que venga después va a ser peor”, disparó el legislador aliado del ministro de Defensa Agustín Rossi.

Martínez, en diálogo con Rosario/12, pidió a quienes “conocen más al gobernador” que sean los que “más intensamente” transmitan el mensaje del oficialismo. “A mí nadie me llama por teléfono para hacer una determinada cosa, la hacemos naturalmente”, consideró el diputado.

—¿Qué opinión le merece el rumbo que tomaron Perotti y Sain en materia de seguridad?

—Estamos en un momento bisagra en materia de seguridad pública en Santa Fe. Hay una decisión política muy fuerte por parte del gobernador y el ministro de Seguridad para terminar con todo lo que venimos denunciando desde el año 2011, el doble pacto, la idea de que el gobierno pacta con la policía y la policía acuerda con el delito. Cuando tenés una decisión política tan fuerte, los militantes, las organizaciones políticas, los referentes institucionales, no tenemos que tener fisuras y tenemos que tener una actitud muy proactiva de defensa del rumbo. Lo que arranca siendo una cuestión de seguridad termina siendo una puja política entre las bandas criminales y el gobierno para ver quién termina construyendo inseguridad. Si el plan Sain fracasa, no sólo va a ser una enorme pérdida de capital político para el gobernador, sino que todo lo que venga después va a ser peor.

—Habló de “fisuras”, ¿considera que no todos dentro del PJ están sosteniendo el rumbo?

—Hay intensidades, todos están encolumnados, pero hay intensidades de apoyos y de hacerlo explícito a ese apoyo. Nuestra organización política, la Corriente de la Militancia, con nuestra referencia Agustín Rossi, cree que hay que tener una actitud proactiva de defensa del gobierno. Esto nos lo enseñó el kirchnerismo, Néstor (Kirchner) y Cristina (Fernández). Los que estamos defendiendo el gobierno no podemos esperar que el gobierno nos convoque para su defensa, tenemos que tener una actitud que naturalmente nos surja. El parámetro tiene dos espacios importantes, uno es en la pública, donde hay dirigentes muy importantes como el caso del diputado Leandro Busatto, que es hoy quien mejor defiende el rumbo del gobierno provincial en la pública. El otro espacio es tratar de darle a nuestra militancia política, que ha sido muy intensa en 2019 y nos ha permitido en Rosario cuatro triunfos, dos de Perotti y dos de (Alberto) Fernández, y pegamos en el palo con Roberto Sukerman…darle a nuestra masa militante información política para poder dar los debates que hay en la calle.

—Hacia dentro del PJ, ¿no todos practican esa militancia?

—Estamos de menor a mayor, cada organización tiene sus tiempos. Lo que uno trata es de ponerle un poco de picante a la comida para que todos reaccionen un poco más rápido. Lo que vamos logrando es una actitud donde todos podamos ir sosteniendo el rumbo y dándole densidad pública y militante a un camino que, creo, es el acertado.

—¿Quiénes son los “autoproclamados perottistas”, a los que hizo referencia en una actividad de la Corriente?

—Tenemos un gobierno provincial que es el reflejo de un armado electoral que conseguimos en febrero de 2019, que tiene una diversidad de actores. Nuestra ahora vicegobernadora Alejandra Rodenas hablaba de “unidad en la diversidad”. En esa diversidad hay sectores que vienen claramente referenciados en la figura del gobernador, hay sectores que venimos más vinculados al kirchnerismo, hay otros sectores que vienen del movimiento obrero. En este momento tenemos que tener claro todos lo que estamos jugando, el partido que está jugando hoy la gobernabilidad política en Santa Fe. Aquellos que conocen más al gobernador son los que más intensamente tienen que transmitir ese mensaje. Nosotros, como aliados del espacio político, como integrantes del Frente de Todos, tenemos esta actitud, es nuestro ADN, pedimos la misma intensidad de todos los que conforman el frente en la provincia.

—¿Por qué le falta intensidad a ese perottismo?

—Hay formas y estilos de construcción política. Probablemente merezca otra reflexión, pero los que venimos del kirchnerismo estamos más acostumbrados a argumentar en la línea de “un nosotros y un ellos”. Eso nos tiene marcados a fuego y rápidamente sabemos dónde están las pujas de poder político y tratamos de conformar un bloque de poder que defienda nuestras posiciones. A mí nadie me llama por teléfono para hacer una determinada cosa, la hacemos naturalmente. Cada uno está haciendo su camino, pero creo que estamos mucho mejor, el gobierno, con todos sus actores institucionales, ha salido mucho más fuerte en respaldo a las políticas de Perotti y Sain. Bienvenida sea cualquier situación que haya generado una reacción más intensa.