A pesar de la trágica muerte de Kobe Bryant, la NBA no tomó la decisión de suspender la jornada, y el encuentro entre Denver Nuggets y Houston Rockets comenzó a jugarse ya que la confirmación de la noticia se produjo muy cerca del inicio del partido. También empezó el duelo entre San Antonio y Toronto, otro de los ocho juegos programados para este domingo.
En Denver, los jugadores debieron salir al Pepsi Center a menos de una hora de que se conociera la noticia, con una cinta negra en sus camisetas en señal de duelo. Por eso motivo, antes del encuentro se llevó a cabo un emotivo minuto de silencio, en el que se pudo ver a varios protagonistas con lágrimas en los ojos, mientras que Russell Westbrook, visiblemente consternado, rezaba nervioso.
PJ Tucker, jugador de los Rockets, improvisó un homenaje al escribir en su zapatillas las leyendas "RIP KB" y "te amo KB24" con un fibrón negro, mientras que Tyson Chandler, que fue compañero de Kobe, lloraba desconsolado en el banco de suplentes con el encuentro ya comenzado, meneando la cabeza de un lado al otro, como sin entender lo que estaba sucediendo.
En el AT&T Center de San Antonio, el homenaje lo hicieron los dos equipos de manera combinada, ya que dejaron consumir las dos primeras posesiones de 24 segundos sin jugar, mientras el estadio aplaudía y coreaba el nombre de Kobe Bryant. Tras ese pequeño gesto, el juego comenzó a desarrollarse normalmente.
