"Un país endeudado es un país que pierde capacidad de decidir, condicionado en su futuro. Todo esto es lo malo de la deuda. Es asombroso que Mauricio presidente diga lo que dijo y que los argentinos escuchen que un presidente hable con tanta irresponsabilidad". El presidente Alberto Fernández habló sobre la negociación de los pagos de deuda y del video del ex presidente Macri donde dijo que advirtió a sus funcionarios "que el país se iba a la mierda si tomábamos deuda". Apuntó que hacía falta "una negociación rápida" con los acreedores y que, además del aumento general para los jubilados, habrá en marzo también un "aumento adicional" para las jubilaciones más bajas. Destacó su viaje a Israel y anunció que enviará al Congreso proyectos de ley para renegociar títulos de la deuda, que han sido emitidos con prórroga de la jurisdicción, las jubilaciones de privilegio del Poder Judicial y diplomáticos, la ley de reforma de la justicia federal y la ley de góndolas, que ya tiene media sanción de Diputados.
En una entrevista con C5N, Fernández cuestionó las palabras del exmandatario Mauricio Macri y planteó que "es asombroso que los argentinos escuchen que un presidente diga lo que dijo". En un encuentro con militantes en Villa La Angostura, Macri aseguró que él había advertido a su equipo sobre el riesgo de tomar deuda eternamente, pero no accionó para evitarlo. “Yo siempre les decía a todos: ‘Cuidado que los mercados no te dan más plata y nos vamos a la mierda’ ”, comentó Macri.
Una lectura tenebrosa
"Es una lectura muy tenebrosa de su parte, me impresionó mucho que un presidente diga que sabía que tomar deuda como se hizo iba a hacer explotar la economía. Yo no sé si estaba en un grupo terapéutico. Si yo viera que un ministro me induce a hacer algo que va a lastimar la vida de los argentinos, no avanzo ni un paso más", señaló sobre las polémicas declaraciones que realizó Macri en una reunión en Río Negro.
"Se trató de una política inducida por el gobierno nacional, pero los gobernadores también tienen la responsabilidad de haberlo hecho. Muchas provincias creyeron que era una buena alternativa tomar deuda de esa manera y era una enorme trampa. Se tomaba deuda, y se tomaba el compromiso para pagarla en muy corto plazo. Sin embargo Santa Cruz también fue inducida para que lo haga, y decidió no hacerlo", aseguró Fernández, apuntando contra la política que difundió el gobierno nacional y que dejó a Mendoza, Buenos Aires, Córdoba, Chubut y Tierra del Fuego, entre otras, con serios problemas para solventar los compromisos. "La provincia de Buenos Aires tiene las arcas públicas diezmadas. Hay que dejarlo andar a (el gobernador bonaerense) Axel Kicillof. En este viaje pudimos hablar mucho. Hay que dejarlo hacer. No quiere pagar irresponsablemente a costa de postergar a los argentinos. Va a ser imposible de ser pagada como estaba. Es acertado parar la pelota, postergar la fecha de pago y convocar al análisis y la racionalidad a los bonistas", apuntó sobre el abordaje del endeudamiento que estaba realizando el gobernador.
Precios y desigualdad
Además, señaló que se estaba poniendo especial atención en "la evolución de los precios, una pelea que vamos a dar de cualquier modo. Con precios cuidados se pudo contener mucho, pero vemos empresarios que aumentan precios de marcas alternativas".
"Lo que esta claro es que hubo políticas en la región que generaron una desigualdad, una brecha más grande entre ricos y pobres. La Argentina no está muy distante de lo que pasa en los países de la región. Fueron cuatro años de políticas que generaron el disgusto de sectores de la población, entonces estamos escapando de ese precipicio, pero hace dos meses y medio estábamos acelerando hacia el precipicio. Ahora estamos saliendo con el esfuerzo de todos", apuntó el presidente haciendo hincapié en el cambio de aire que se dio en América del Sur, con el viraje político hacia la derecha y las consecuencias que trajo en toda la región.
Líderes internacionales y deuda externa
Apenas llegado de la gira internacional para asistir al Foro Mundial del Holocausto en Israel, Fernández aseguró que había vuelto "muy satisfecho" porque "fue propicio para hablar con muchos líderes mundiales, con el presidente de Italia, pude intercambiar saludos con (el presidente ruso, Vladimir) Putin, y tener un contacto con (el presidente de Estado Unidos, Donald) Trump. También pude hablar con el opositor a (el primer ministro israelí, Benjamín) Nethanyahu. "Llevamos la mirada realista que tenemos de lo que pasa. La diferencia que los líderes observan es que les decimos la verdad. No mentimos, no nos disfrazamos de nada. Y hemos sentido vocación de ayudar", destacó sobre la recepción que tuvieron los dirigentes políticos mundiales con los que trató en el viaje.
"Necesitamos una definición medianamente rápida del tema de la deuda. Siempre digo que no pierdan de vista que estamos en una negociación y por lo tanto hay que ser muy cuidadoso, para no despertar malestares. Sobre el tema deuda solo actúa y habla (el ministro de Economía) Martín Guzmán y yo, para que no pase que se empieza a especular y se complica la negociación", explicó para alejar especulaciones sobre declaraciones de otros dirigentes.
La reforma de la justicia
"Estamos trabajando sobre la reforma de la justicia. Es un tema complejo y delicado. Queremos una justicia federal mas activa. En en el resto del país está más enfocada en el crimen organizado y en la ciudad de Buenos Aires parece poner más el foco en los temas de corrupción, que esta bien pero que es insuficiente". Estamos evaluando cómo podemos construir una nueva justicia federal. Estoy trabajando personalmente en el tema", adelantó Fernández, sobre el proyecto que tiene en sus manos el Secretario de Asuntos Estratégicos de la Presidencia y ex ministro de Justicia, Gustavo Béliz. Además apuntó que se estaba poniendo especial atención en "la evolución de los precios, una pelea que vamos a dar de cualquier modo. Con precios cuidados se pudo contener mucho, pero vemos empresarios que aumentan precios de marcas alternativas".
Al finalizar el presidente insistió con que "el mundo celebra que los argentinos decimos la verdad", y explicó la posición argentina en la que "aceptar la globalización no nos obliga a ser idiotas, Podemos estar en la globalización sin dejar de lado los intereses argentinos".