En su último año en la presidencia Mauricio Macri también le dio una ayudita a Techint. Según surge del acuerdo que la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), la Cámara Argentina del Acero (CAA) y el Centro de Laminadores Industriales Metalúrgicos (Clima) celebraron en agosto pasado, ese grupo no pagó cargas sociales en los aumentos que otorgó en 2019. La exención contradice un decreto el propio Macri y le permitió a Techint ahorrar al menos 400 millones de pesos.
El decreto que le impedía al grupo liderado por Paolo Rocca hacer lo que hizo es el 633/2018. Lo firmaron Macri; su jefe de Gabinete, Marcos Peña; y el entonces ministro de Trabajo, Jorge Triaca. Su objetivo era limitar los aumentos no remunerativos a los que recurren las empresas para bajar sus costos laborales.
Según reveló el Ámbito Finaciero, el acuerdo firmado el agosto de 2019 con retroactividad al 1 de abril de ese mismo año contempló “gratificación extraordinaria no remunerativa” para los trabajadores. Esa gratificación no fue otra cosa que el aumento para todo 2019 y se pagó en cuatro cuotas. En el acuerdo se estableció que recién en diciembre, tras el pago de la última cuota, la suba se reconvirtiera en un incremento suba salarial remunerativo de 30% sujeto a una revisión.
A comienzos de este año, el grupo Techint despidió a 191 trabajadores de su planta de tubos de acero en Campana, Tenaris/Siderca. Ante el conflicto, el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires dictó la conciliación obligatoria .
La medida adoptada por el grupo que conduce Paolo Rocca es un calco de lo que pasó en 2016, a principios de la gestión macrista. Los gremios interpretan que es un mensaje hacia el nuevo gobierno para lograr mejores condiciones en la negociación por los precios del gas para Vaca Muerta y por los aranceles en el precio de la chapa.