David Schwimmer sugirió que debería haber una versión de Friends “negra o asiática”. En los últmos tiempos y sobre todo tras su arribo a Netflix en 2017, la popular sitcom ha sido objeto de críticas: los espectadores millennials expresaron reservas por sus líneas narrativas “problemáticas”, describiéndolas como transfóbicas, homofóbicas o sexistas.

En una entrevista con el periódico inglés The Guardian, el actor defendió al show de esas críticas, y propuso que se realice una remake más diversa. “Quizá debería haber unsos Friends negros o asiáticos”, dijo. “Pero yo estaba bien al tanto de la falta de diversidad en la serie, y durante años hice campaña para que Ross tuviera citas con mujeres de color”, señaló. “Una de las primeras novias que tuve en el programa era una asiático-estadounidense, y más tarde salí con afroamericanas. Era una presión muy consciente de mi parte.”

“También es interesante cómo el show manejó el judaísmo”, señaló también Schwimmer. “No creo que fuera algo que sacudiera la tierra o la convirtiera en pionera, pero al menos fui feliz de que hubiera un episodio que se centrara en Jánuca y no en la Navidad. Me hizo feliz que al menos tomáramos nota de las diferencias religiosas”.

Schwimmer también expresó su frustración por el hecho de que viejos shows sean juzgados fuera de contexto. “La verdad es que Friends también exploró nuevos territorios en la manera en la que lidió con el sexo casual, el sexo seguro, el matrimonio gay y las relaciones”, dijo. “En el piloto, a mi personaje lo dejaba su esposa para irse con una mujer y había un casamiento gay, el de mi ex y su esposa, al que yo iba. Creo que el problema actual en muchas áreas es que hay muy poco que se considere en su contexto. Tenés que verlo desde el punto de vista de lo que el programa intentaba hacer en ese momento. Soy el primero en decir que quizá algunas cosas eran inapropiadas o insensibles, pero creo que en ese momento mi barómetro estaba bastante bien. Estaba a tono con temas sociales y temas de inequidad."

 

Friends estuvo en el aire durante diez años hasta 2004, protagonizado por Schwimmer, Jennifer Aniston, Matthew Perry, Courtney Cox, Lisa Kudrow y Matt LeBlanc. Sobre el siempre presente tema de una potencial reunión, el actor fue terminante: “No creo que sea posible, dadas la diferente trayectoria de las carreras de cada uno. Creo que todos sienten lo mismo: ¿para qué estropear lo que creemos que fue un buen final para la serie? No quiero hacer nada por el dinero. Tendría que ser algo que tuviera sentido creativo, y nada de lo que escuchamos y se nos presentó hasta ahora lo tuvo”.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.