Desde Santa Fe
“La deudas que tenemos con muchos de ustedes no las podemos pagar porque la caja está vacía”. El llamado de ayer de Omar Perotti en la Casa Gris a directivos de más de 80 entidades de la producción, el campo y el trabajo y la cultura arrancó casi como una convocatoria de acreedores. El ministro de Economía Walter Agosto fue descarnado al describir los números que encontraron en la provincia el 11 de diciembre: confirmó que el gobierno de Miguel Lifschitz dejó un déficit de 18.000 millones de pesos al cierre del ejercicio 2019, una deuda flotante que supera los 27.000 millones y vacío el Fondo Unificado de Cuentas Oficiales (FUCO) que tenía 15.000 millones poco antes de terminar su mandato. El gran problema es la imposibilidad de financiar semejante rojo si la Legislatura no aprueba una ley de Necesidad Pública –como la llaman- que el gobernador enviará en los próximos días a las Cámaras. Los puntos sustanciales de la norma fueron anticipado por Perotti y el gabinete a sus interlocutores en el Salón Blanco. El ministro de Gestión Pública Rubén Michlig adelantó que la ley propone asistir la emergencia social y alimentaria de la provincia con un Fondo de 2.500 millones, la emergencia sanitaria con otro Fondo similar por la misma cantidad, un pedido para reconstituir el FUCO con 15.000 millones y un mecanismo para asistir las emergencias de municipios y comunas con 3.000 millones de pesos.
La reunión arrancó a media tarde. Perotti dio la vuelta en el Salón Blanco para saludar a sus invitados, uno por uno, así que se pueden calcular 160 apretones de manos. Lo seguía la vicegobernadora Alejandra Rodenas y los ministros del gabinete. Estaban todos: Agosto y Michlig que explicaron la ley. Sain que fue tan descarnado como su colega de Economía para explicar la situación que encontró en el Ministerio de Seguridad. Y el ministro de Gobierno, Esteban Borgonovo, quien tiene que lidiar en la búsqueda de consenso en la Legislatura, lo que no parece fácil, porque ya se sabe que el bloque de Lifchiz mandó al archivo la primera ley de emergencia que propuso Perotti, el 30 de diciembre, y sus principales espadas ya prometen repetir la escena.
El gobernador presentó a su ministro de Economía para que explicara la realidad de la provincia. Agosto se ayudó con cuadros que exhibió en una pantalla. Uno de ellos confirmó que Lifschitz dejó en 2019 un déficit de 18.200 millones de pesos. Ocho mil millones más de lo que admitía el ex gobernador y en línea con los 20.000 millones que pronosticó el equipo de Perotti en la transición, en julio de 2019.
La Ley de Necesidad Pública crea un Fondo para políticas alimentarias de 2.500 millones de pesos con aportes del Tesoro y el gobierno nacional
El cuadro de Agosto mostró la evolución del resultado fiscal desde 2007 hasta el 2019: los doce años del socialismo. Y una síntesis: “Nueve años de déficit, tres años de superávit. Doce años de déficit acumulado: 32.510 millones de pesos en gastos corrientes y 99.643 millones en gastos constantes.”
El rojo comienza la escalada en 2015, en el último año del gobierno de Antonio Bonfatti: 5.014 millones de déficit. Lifschitz equilibra en 2016 con 150 millones de superávit. En 2017, pasa a un déficit de 6.941 millones, en 2019 a un superávit de 2.166 millones y en 2019 cierra con el déficit que Agosto confirmó ayer: 18.200 millones de pesos. “Déficit acumulado (en los cuatro años de Lifschitz): 22.824 millones en valores corrientes y 30.347 en valores constantes”, explicó el ministro.
En otro tramo, Michlig adelantó los puntos sustanciales de la ley de Necesidad Pública que Perotti enviará a la Legislatura.
*Emergencia social y alimentaria. Crea un Fondo para políticas alimentarias de 2.500 millones de pesos con aportes del Tesoro y el gobierno nacional. La idea de la provincia es reforzar lo que no cubre el Plan Nacional Argentina contra el Hambre. La Nación invertirá en Santa Fe con la Tarjeta Alimentaria 500 millones de pesos mensuales. El gobierno de Perotti pretende aportar otros 200 millones mensuales para la Tarjeta de Ciudadanía que hoy asigna apenas 300 pesos. El presupuesto de la provincia para refuerzos alimentarios es escaso: 1.450 millones. El objetivo es triplicar esa cifra.
*Emergencia sanitaria. Igual que la anterior. Propone crear un Fondo de 2.500 millones de pesos destinado a programas de atención de la salud, fomentar las actividades del Laboratorio Industrial Farmacéutico (LIF) y mejorar los sistemas de emergencias.
*Contrataciones públicas. Ante una deuda flotante que supera los 27.000 millones, el gobernador pedirá facultades para reprogramar o incluso suspender contratos cuando no se puedan cumplir.
*Emergencia financiera. El presupuesto 2020 que Lifschitz le armó a Perotti le otorga la posibilidad de consolidar deudas, pero no de financiarlas. La ley pedirá herramientas en esa línea. Y solicitará un endeudamiento para reconstruir el FUCO con 15.000 millones.
*Tarifas y boletos. Dos objetivos importantes de la ley. Sostener las tarifas de la EPE y de Aguas Santafesinas congeladas por seis meses y financiar el boleto educativo.
*Municipios y comunas. Crea un régimen para asistir a la emergencia financiera con un fondo de 3.000 millones de pesos a distribuir con el mismo sistema que la coparticipación.