La jueza de Garantías Patricia Rahmer ordenó clausurar un predio, en la zona urbana del pueblo de Río del Valle, denunciado como un depósito de agroquímicos y máquinas para fumigar. 

La jueza informó a Salta/12 que ya firmó la orden de clausurar el lugar si encuentran agroquímicos y máquinas fumigadoras. El comisario mayor, Eduardo Andrada, a cargo de la Unidad Regional 5 del departamento de Anta, informó que hasta la tarde no habían recibido ningún oficio del Juzgado para proceder con el operativo de clausura. 

La fiscala de Metán Susana Redondo Torino, quien interviene como subrogante en el departamento Anta, solicitó la clausura del predio donde se guardan agroquímicos y máquinas utilizadas para las fumigaciones en los campos de cultivo transgénico. La solicitud de la fiscala se originó en la denuncia de un vecino que vive al lado del galpón y sostiene que su salud y la de su entorno familiar y de vecinos fue afectada por los químicos.

El vecino Eric Zamora denunció el 17 de diciembre de 2019 al propietario de una empresa fumigadora, Hermes Rivarosa, por guardar agroquímicos y máquinas con residuos de los productos químicos en un galpón dentro del pueblo. Zamora tiene su vivienda familiar al lado de ese predio, dijo que el olor que despiden los productos es muy fuerte, que le producen dolores de cabeza y malestares, por ello considera expuesta su salud, la de su familia y de la comunidad. El vecino tuvo que llevar a su hijo de cuatro años desde Río del Valle a Las Lajitas, temiendo que el niño se enferme por la cercanía de los agroquímicos.

Pese a la decisión de la justicia, Zamora dijo que vio a Rivarosa llevando cosas del predio a otro lugar. Los uniformados a los que consultó le dijeron que no tenían ninguna orden judicial para realizar el operativo.

El Ministerio Público Fiscal difundió el pedido de clausura del lugar antes de que la jueza hiciera lugar y de que interviniera la Policía. Consultado por Salta/12, el jefe de la UR5 dijo que esto dificultaba el procedimiento que debían realizar. 

Redondo consideró el hecho de que se almacene agroquímicos dentro del pueblo "un hecho contravencional contra el ecosistema". Después de que Zamora denunciara, el personal policial realizó el acta  correspondiente y la fiscal Redondo Torino, solicitó una medida inhibitoria al Juzgado de Garantías, requiriendo en primer lugar la habilitación en feria y en carácter de "muy urgente" ordenar como medida cautelar la clausura del predio en la localidad de Río del Valle aunque todavía  no se efectivizó.

La fiscala Redondo Torino fundamentó el pedido en el Código Contravencional de la Provincia, que exige tener la certificación de aptitud ambiental para manipular agroquímicos ya que de esta forma se evitaría el daño al ecosistema.

La jueza Rahmer explicó a Salta/12 que "no se pueden tener agroquímicos o venenos" dentro de zonas urbanas, dijo que es una contravención. Aseguró que dio la orden para que se clausure el predio. "El dueño puede recuperar la funcionalidad del lugar pero no puede volver a acopiar ahí agroquímicos porque son peligrosos para la salud", sostuvo la magistrada. También añadió que la medida incluye la prohibición de guardar allí las máquinas usadas para fumigar.

Zamora especificó a Salta/12 que un grupo de vecinos está luchando para que se prohíban las aplicaciones de agroquímicos "en un radio determinado en base a lo que planteen especialistas, no solo de glifosato sino de todos los venenos". El joven tiene también la casa rodeada por un campo sojero perteniente al empresario Osvaldo Ferrari, tanto él como sus vecinos y vecinas sufren las exposición a las fumigaciones.

"Los medios ejercieron presión sobre la justicia. Que clausuren es una medida que sirve pero también hay otro predio con máquinas fumigadoras y agroquímicos al lado de la plaza (en Río del Valle)", manifestó. 

"Mis vecinos a los que les hizo un relevamiento la Policía dijeron que sienten fuertes olores y que tienen problemas respiratorios, dérmicos y renales. Lo que más prevalece es el asma", aseguró. Al lado del pueblo, que está rodeado de campos con cultivo transgénico de distintas empresas, también hay un silo de la firma Viluco SA.

Zamora contó que también en Río del Valle se encuentra la escuela 4.364 Francisco Juncosa, rodeada de campos sojeros. 

El joven integra un grupo de vecinos y vecinas que se están organizando con otros de las localidades de Gaona, General Pizarro, Salta Forestal, Piquete Cabado. Por lo pronto, tienen la idea de hacer una reunión de pueblos fumigados. 

Piquete Cabado, otro pueblo fumigado

Zamora contó que el grupo que se está conformando en la lucha por la regulación del uso de agroquímicos ha comenzado un  relevamiento en Piquete Cabado, donde las familias que han entrevistado manifestaron que padecen  alergias, problemas respiratorios, diabetes, y cáncer. Este pueblo corresponde a la jurisdicción del municipio de Joaquín Víctor González pero tiene cercanía con Las Lajitas

"Nos estamos enfocando también en Piquete Cabado, es mayor la exposición ahí porque tienen máquinas fumigadoras, avionetas fumigadoras y silos" dentro del pueblo, además de los campos transgénicos que les rodean, dijo Zamora. En este lugar, una maestra viene realizando denuncias y presentaciones desde 2012, sin respuestas en la Justicia, ni en el Ministerio de Educación ni de Salud Pública, de Medio Ambiente y la Defensoría del Pueblo de la Nación. Los hijos de la mujer "son alérgicos a los ácaros de los silos". "Cuando fumigaban con avionetas los fumigaban a ellos", dijo Zamora.

En Piquete Cabado tiene sus campos la familia Olmedo, el finquero Osmar Monaldi, está la empresa Cereales del Sur, y la empresa China Cofco, de acopio de cereales.