TATUAJES: COMO Y POR QUE
Tatuarse para pesistir
Mi nombre es Francisca Neira. Mi primer tatuaje me lo hice a los 16 años. Es muy pequeño, en verdad lo que me importaba era el hecho de tatuarme, marcarme. En ese tiempo yo me juntaba con un grupo de chicos punk y en el fondo la idea era revelarse ante una estructura que imponían ciertos colegios. Me parece que hay un uso que tiene que ver con el tatuaje como una herramienta de rebeldía y transgresión frente a la lógica en la que vivimos. Una lógica en la que prima lo pasajero, la inmediatez de las cosas, las satisfacciones vacías. El tatuaje es todo lo contrario, es algo que uno se hace y permanece. Después te podés tatuar cosas encima pero seguís estando tatuade, te lo podés borrar con láser pero vas a seguir con una marca en tu cuerpo. Por otra parte necesitás pasar por un proceso doloroso para estar marcade, y se puede acceder a través de formas que no son un intercambio comercial: muchas veces podés acceder a un tatuaje a través de un trueque, por ejemplo.
























