Desde Santa Fe 

Una llamada del gobernador Omar Perotti al presidente de la UCR, Carlos Fascendini (foto), destrabó ayer la negociación política con el núcleo duro de la oposición para que la Legislatura apruebe la ley de Necesidad Pública –como se llama ahora la declaración de emergencia social, alimentaria, sanitaria, económica y en seguridad- que el mandatario enviará la semana próxima al Senado. Antes hubo otra llamada del ministro de Gobierno Esteban Borgonovo. Así, que el lunes, a las 11, en la Casa Gris, Borgonovo, recibirá a los diputados del radicalismo encabezados por Fascendini. “¿Los radicales le confirmaron que van a ir?”. “Así es”, dijo Perotti. Y anunció que “la semana que viene” enviará su mensaje a la Legislatura, con los “aportes” que recibió su ministro político en la ronda de diálogo que inició hace dos semanas.

El martes, Borgonovo tenía en agenda una reunión con los diputados de la UCR, que la levantaron con excusas políticas. Pero esa misma tarde, Perotti reunió a más de 80 entidades empresarias, del campo y el mundo del trabajo y la cultura, a quienes les dijo que recibió la provincia con la “caja vacía” y un bache financiero que el ministro de Economía Walter Agosto estimó en 51.588 millones de pesos que deberá financiar este año. Varios de sus interlocutores propusieron convocarse en la Legislatura para reclamar la sanción de la ley a los legisladores que no quieren votarla.

Ayer, Perotti –antes de recibir a la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic- sugirió que los radicales habían pasado del no del martes, al sí del jueves. Todos los legisladores de la UCR que Borgonovo recibirá el lunes forman en el bloque de Miguel Lifschiz, que no solo rechazó la primera declaración de emergencia que pidió Perotti, sino que la mandó al archivo, el 30 de diciembre.

“El lunes, vamos a recibir a la UCR”, sorprendió Perotti.

--¿Le confirmaron que van a ir?

--Así es. Después de las reuniones y los aportes, enviaremos el proyecto de ley a la Legislatura la semana que viene –informó el gobernador.

Fuentes de la Casa Gris revelaron a Rosario/12 que el propio Perotti llamó a Fascendini para destrabar las negociaciones con la UCR. Antes, lo llamó Borgonovo. En el gabinete intepretan el cambio a la luz de dos hechos políticos: la reunión del viernes pasado de Perotti, Borgonovo y el ministro de Gestión Pública, Rubén Michlig con los foros de intendentes radicales , socialistas y del Frente de Todos y la convocatoria del martes en el Salón Blanco a los actores económicos y sociales de la provincia, algunos de ellos dispuestos a movilizarse hasta la Legislatura.

Esta semana, cuando le preguntaron por algunos planteos de los radicales, Perotti les propuso un "trabajo conjunto" para privilegiar "las necesidades" de la provincia y de los santafesinos y dejar en "segundo plano" las diferencias políticas. La emergencia social, alimentaria, sanitaria, económica y en seguridad "es necesaria para que la gente pueda estar mejor". Esa es la prioridad. "Apostamos a eso, a que el trabajo de consenso que se viene haciendo, tanto con legisladores, intendentes y entidades intermedias” dé resultados.

“Necesitamos una herramienta que pueda ser de utilidad para todos. No queremos facultades extraordinarias, ni delegación de funciones. Lo que hay es sentido común para que podamos tener resuelto la crisis alimentaria”, dijo Perotti.

“Hay 200 mil niños menores de seis años que van a recibir la Tarjeta Alimentar. Pero tenemos otras familias con chicos más grandes que no la van a recibir. Algunas de ellas reciben la Tarjeta de Ciudadanía que asigna apenas 300 pesos. Entonces, si no tenemos leyes que nos permitan resolver esto, ¿de qué estamos hablando? ¿Dónde está la prioridad?, se preguntó Perotti. “Con las cosas que hay que resolver, no puede ser que no tengamos coincidencias. Creo que eso se va a lograr”.

“Lo mismo para el tema de salud, el boleto educativo y el plan para mantener congeladas las tarifas” de la EPE y de Aguas Santafesinas. “Son aspiraciones que tienen un piso de acuerdo" y en ese plano trabajamos. 

--¿Cree que la oposición votará la ley?

--Espero que sí. Hay una realidad muy concreta. La necesidad de superar esta situación adversa la ven todos. Aquí hay dificultades en las familias, en la lucha contra el hambre, en muchos proveedores y contratistas del Estado que tienen que hacerse cargo del funcionamiento de su empresa y sin estas herramientas vamos a estar con muchas dificultades para hacerlo. Entonces, es necesario que podamos tener un poco de alivio en esta situación adversa.