El diputado Máximo Kirchner analizó que lo que se vio ayer en la marcha de la CGT fue a “cientos de miles de trabajadores exigiendo un paro” y que “será responsabilidad de los dirigentes si interpretan o no” ese mensaje. Dijo también que ese reclamo es consecuencia “de un plan económico planificado que el Gobierno está llevando adelante con plena conciencia”. “Acá los números no cierran y la gente está empezando a quedar afuera”, advirtió.
Kirchner se refirió al reclamo de la convocatoria al paro que dominó la movilización de la CGT y destacó: “Hace mucho tiempo no recuerdo una situación de ese calibre.” Al respecto, consideró que es “muy sano que quienes concurren a un acto interpelen a quienes tienen la oportunidad de conducir y decidir” y que “nadie debe enojarse por la interpelación, sino que debe asumirla y representarla”.
El diputado planteó que “si vos estás arriba de una tarima y tenés 250 mil trabajadores gritándote paro general y no lo llamás o dudás, es evidente que hay algo en el medio que no se entiende o no se comprende”. Prefirió no hablar de un acuerdo entre la dirigencia de la central sindical y el Gobierno, sino que dijo que “tal vez es el miedo” y citó el caso de la exhibición de la cara de los hijos de Roberto Baradel en televisión. “Yo no dudo de la combatividad de Schmid. Yo lo vi pararle a Cristina por el Impuesto a las Ganancias y con asistencias mucho menores a la de ayer. Es evidente que puede haber temor en los dirigentes respecto de las consecuencias de asumir la representación de los trabajadores”, completó su reflexión, con un dejo de ironía.
Kirchner también salió al cruce de quienes acusaron al kirchnerismo por los incidentes al final de la marcha de la CGT y en particular cuestionó a Héctor Daer por sus afirmaciones en ese sentido. “Es una actitud típica del poder macartear a quienes piensan diferente. Tratan de ocultar lo que fue la masividad de la marcha de ayer en pequeñas tensiones que siempre suelen ocurrir en actos grandes”, sostuvo en una entrevista con Radio 10.
El referente de La Cámpora advirtió sobre las consecuencias de la política económica de Macri y aclaró que “no es que algo esté saliendo mal”. “Ante cada punto de inflexión, el Gobierno se encuentra siempre más cerca de los sectores concentrados de la economía que de los trabajadores”, declaró.
Kirchner vaticinó que “si la economía argentina crece, lo va a hacer en un sector muy limitado y con poca generación de trabajo”. También recalcó que el gobierno de Macri “está empujando a un montón de argentinos fuera del mapa”.